El 46% de los menores vive en un hogar con un modelo de vida inadecuado
La Junta protege a casi 1.400 niños y tutela al 48,3% de ellos
Maltrato físico, explotación sexual, delincuencia y abandono, causas de la desprotección
El centro Zambrana de Valladolid acoge a jóvenes con problemas
Un total de 1.382 niños son objeto de medidas de protección por parte de la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, institución que posee la tutela del 48,3% de ellos, es decir, de 667 menores. Las causas de desprotección son diversas y en grados muy distintos y abarcan desde la negligencia física hasta la explotación sexual y la inducción a la delincuencia. Los motivos más habituales por los que la Administración autonómica protege a los niños son la negligencia física y la psíquica, que afectan al 58% y el 53% de los casos, respectivamente. Estos conceptos se refieren a la falta de atención continuada de las necesidades básicas del menor -alimentación, vestido, higiene, educación y cuidados médicos- (negligencia física, en 803 niños); y a la carencia de respuesta ante las peticiones de cariño del niño (psíquica, en 730). Además, 632 menores (46%) viven en un hogar que constituye un modelo de vida inadecuado por contener pautas asociales o autodestructivas; en 519 casos, los padres no pueden cumplir con sus obligaciones parentales; y 449 niños han sufrido maltrato psicológico, esto es, hostilidad verbal crónica en forma de insulto, desprecio o crítica, que puede llevar hasta el encierro del menor. Violencia y explotación Los malos tratos físicos afectaron a 269 pequeños (el 19%) y 228 fueron abandonados por sus padres o tutores. También se conocen 42 casos de renuncia o negativa explícita a reconocer la paternidad o maternidad de un niño, mientras que 67 menores fueron objeto de acciones de inducción a la delincuencia por parte de sus padres, que refuerzan pautas de conducta antisocial o desviadas y utilizan a su hijo para desempeñar acciones delictivas (transporte de drogas, hurtos...). Otro tipo de malos tratos, con menor incidencia en Castilla y León según los datos que maneja la Junta, son los abusos sexuales, que provocaron la actuación de la Administración en los casos de 20 niños. Además, tres menores han sido víctimas de explotación sexual, al haber sido utilizados en la prostitución o en la realización de pornografía; y la explotación laboral ha sido la causa de la protección de 28 niños más.