Y al final... las colas

Adiós Banco de España, adiós. Hoy cierra sus puertas la sede del banco nacional en Ordoño II y, a partir de ahora, las gestiones habrá que ir a hacerlas a Valladolid o a Asturias, pero los leoneses mientras tanto parecen haberse dado cuenta a última que el Banco de España estaba en la calle Ordoño y se acercan a la oficina para cambiar las últimas pesetas, que aún les quedan, por euros. «Estamos trabajando y mucho, en e estos últimos días», asegura uno de los pocos trabajadores que aún quedan en la entidad. Según explica, hasta más de cien personas se acercan diariamente hasta ventanilla con sus pesetas, «incluso las rubias, que ya no se cambian», -puntualiza-, para adquirir los euros. Lo que más sorprende a los trabajadores es que las cantidades no son pequeñas. «Lo más normal es que vegan con un millón de pesetas», aseguran los trabajadores. Cabe recordar que, hasta 2,5 millones de pesetas Hacienda no fiscaliza ese cambio de moneda. Hoy, a las 13.00 horas, el Banco de España dirá adiós a León tras más de cinco décadas de trabajo en el centro de la capital. Plan de reestructuración El Banco de España completará así su plan de reestructuración con el cierre de sus oficinas en un total de 10 provincias que representan un 8% de la operativa tradicional del instituto supervisor, consistente en el movimiento de billetes y monedas y en la disposición de cuentas corrientes mediante cheques y transferencias. En concreto, la Institución que dirige Jaime Caruana cerrará las puertas de sus sucursales en Córdoba, Granada, Cádiz, Cáceres, Ciudad Real, Gerona, León, Pontevedra, Santiago de Compostela y Vitoria, completando así un proceso de reestructuración que ha supuesto, desde diciembre del 2002, el cierre escalonado de 30 de sus 52 delegaciones y la modernización de las 22 restantes. En Andalucía cierra sus sucursales centenarias de Córdoba, Granada y Cádiz, que se unen a los cierres realizados el pasado año en Jaén, Huelva y Almería y al plan de modernización en las sucursales de Málaga y Sevilla. Este proceso de reorganización a nivel nacional es consecuencia de la reordenación operativa y humana iniciada por los doce bancos centrales de la zona euro tras su integración en el Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC) en 1998. Las fuentes precisaron que a raíz de la creación del SEBC y del Banco Central Europeo, el sector financiero impulsó una fuerte inversión en la informatización de sus servicios, que ha supuesto una