Un hombre falleció por infarto este verano en la localidad salmantina
Antón niega descoordinación con el 112 en el caso de Agallas
El consejero asegura que las dificultades de comunicación con el centro de salud se debieron a Telefónica
El consejero de Sanidad de Castilla y León, César Antón, desveló ayer que la investigación abierta a raíz del fallecimiento el pasado día 21 de agosto por un paciente en Agallas (Salamanca) tras sufrir un infarto y las dificultades de conexión entre el Servicio de Emergencias 112 y el Centro de Salud de Robleda para la atención de la víctima se debieron a un fallo en la línea de teléfono, avería de la que responsabilizó a Telefónica. Antón, quien compareció a petición propia en la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento regional, en el castillo de Fuensaldaña, explicó que la familia del afectado contactó con el Servicio de Emergencias 112 a las 10.47 horas y que fue entonces cuando desde éste se trató de avisar al Centro de Robleda, si bien no fue posible por los aludidos problemas en la línea y finalmente se logró contactar con el personal médico vía fax. En cualquier caso, el consejero destacó que transcurrieron tan sólo 32 minutos desde la primera llamada de alerta hasta que un helicóptero del 112 se desplazó hasta Agallas y que dos minutos más tarde lo hizo el personal del Centro de Salud de Robleda que había sido avisado a través de un fax. La investigación abierta tras la muerte del infartado, quien no llegó a ser evacuado vía aérea debido a que no fue posible reanimarle, ha revelado, según aclaró el consejero, que los problemas de conexión entre el Servicio de Emergencias del 112 y el referido centro sanitario