Los funcionarios se encierran tres horas en las delegaciones de la Junta

Las direcciones provinciales de los sindicatos del área pública de Comisiones Obreras, UGT y Csi-Csif se encerraron ayer entre las 9.00 y las 12.00 horas de la mañana en las nueve delegaciones territoriales de la Junta, dentro del calendario de movilizaciones que tienen previsto para denunciar el incumplimiento por parte del Gobierno autonómico de los acuerdos del Diálogo Social. Los concentrados, que en el caso de la Delegación Territorial de León alcanzaron el centenar, entregaron a los nueve delegados territoriales el mismo texto que se dirigió al consejero de Presidencia y Administración Territorial, Alfonso Fernández Mañueco, con motivo de la concentración del pasado 24 de noviembre que reunió a unos 1.500 delegados sindicales frente al Colegio de la Asunción. Tenso recibimiento Los sindicatos pretenden que se negocien tanto aspectos laborales de los empleados públicos como la reordenación de su representación sindical. Al respecto, recuerdan que los trabajadores al servicio de la Administración autonómica han ido llegando en diferente momento y con diferentes puntos de partida según se han ido asumiendo competencias. Dentro de esta movilización, alrededor de 40 sindicalistas de UGT, Comisiones Obreras, CSI-CSIF y AMPE recibieron ayer en Ávila al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, con pancartas, banderas y gritos de «queremos que se cumplan los acuerdos» laborales del funcionariado de la Administración autonómica a su llegada al acto de inauguración del Centro de Salud Ávila Sur-Este. Herrera criticó la manifestación de los funcionarios por considerarla «extemporánea e improcedente». En dos ocasiones, los gritos de los sindicalistas interrumpieron las declaraciones que el presidente de la Junta realizaba a los periodistas. Los gritos de «Presidente, cumpla los acuerdos», «mentiroso», «esto nos pasa por un gobierno facha» o «vamos a contar mentiras, tralará» fueron algunas de las consignadas coreadas por los sindicalistas, que sorprendieron e incomodaron a los pacientes que esperaban en las consultas. Agentes de la Policía Local de Ávila y de la Policía Nacional acudieron al centro de salud minutos después de que los sindicalistas, que iniciaron sus protestas en la puerta del centro de salud, se introdujeran en el edificio. Finalmente, los policías esperaron en la puerta del ambulatorio, sin tener que intervenir en ningún momento. Durante toda la visita al centro de salud, los sindicalistas continuaron sus protestas.