Las Cortes aprueban la Ley de Mediación Familiar de Castilla y León Aprobada la Ley de Mediación Familiar
Los grupos parlamentarios aprobaron ayer por consenso en el pleno de las Cortes la Ley de Mediación Familiar de Castilla y León que servirá para resolver de forma pacífica los conflictos que se produzcan en el seno de los hogares y que afecten tanto a cónyuges y parejas de hecho con y sin hijos, como a los progenitores en las relaciones con sus hijos ya sean mayores de edad o emancipados y a familiares, independientemente de su grado de parentesco. El texto se validó tras aceptar la Cámara dos enmiendas presentadas por los socialistas y que provocaron que se retiraran el resto. En concreto, las referidas a los deberes del mediador familiar y a los casos de mediación gratuita. La Ley pretende convertirse en una garantía para las familias; establecer un marco de actuación para los profesionales que ejercen la mediación y garantizar, a través de la intervención de la Junta, que todas las familias con pocos recursos puedan disponer de este instrumento. Conflictos entre conyuges Su aplicación afecta a conflictos que puedan surgir entre los cónyuges sobre el uso de la vivienda, cuantía y duración del derecho de alimentos; liquidación del régimen económico, guarda y custodia de los hijos y derechos de visita del progenitor no custodiado, entre otros. Del mismo modo, tendrá efectos para cuando surja un conflicto en casos sobre el uso del patrimonio familiar en caso de viudedad; en herencias para los hijos con discapacidad, gastos de los menores para atender directamente a sus padres, etcétera.