Todas estas obras se enmarcan en el Plan de Infraestructuras del Estado
Adif adjudica la electrificación de dos tramos del AVE en 45 millones
La partida también incluye el coste del intercambiador de ancho en Valdestillas
El Consejo de Administración del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), entidad pública dependiente del Ministerio de Fomento, aprobó ayer la adjudicación de la electrificación de los tramos Madrid-Segovia y Valdestillas-Valladolid, así como la de un intercambiador de ancho en la localidad de Valdestillas, en la nueva línea de alta velocidad Madrid-Segovia-Valladolid. El importe conjunto de ambos acuerdos alcanza la cifra de 45,2 millones de euros. Por lo que se refiere al concurso de electrificación y mantenimiento de la línea aérea de contacto, la empresa adjudicataria es la unión temporal de empresas (UTE) que forman Electrón, Alstom Transporte e Isolux Ingeniería. El importe de esta intervención asciende a 35,5 millones y tiene un plazo de ejecución de 17 meses. El del mantenimiento es de dos años. En concreto, el contrato se centra en la ejecución del proyecto constructivo y la realización del mantenimiento de la línea aérea de contacto, también llamada catenaria, y de los sistemas asociados de calefacción de agujas, alumbrado de túneles y suministro de energía a otras instalaciones. En esta adjudicación también se incluyen las actuaciones necesarias para llevar a cabo la integración de estas nuevas instalaciones con las que se están ejecutando en la actualidad en el tramo Segovia-Valdestillas. Licitación del contrato Mientras, la licitación del contrato de ejecución del proyecto constructivo de un intercambiador de ancho dual en Valdestillas, el presupuesto es de 9,6 millones de euros, con un plazo de instalación de diez meses. La longitud del tramo sobre el que se va a instalar el cambiador suma un total de 1,9 kilómetros. Este intercambiador de ancho servirá de elemento de conexión entre las futuras vías de ancho UIC de la línea de alta velocidad Madrid-Segovia-Valladolid y las actuales de ancho ibérico de la línea Madrid-Hendaya. Admitirá vehículos de una longitud de más de 500 metros y contará con una nave de aproximadamente 400 metros cuadrados que albergará las instalaciones de cambio de ancho. Todas estas obras se enmarcan en el seno del Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte (PEIT) del Ministerio de Fomento, en el que se prevé la conexión de dichas ciudades mediante una nueva línea de alta velocidad que, además, favorecerá las relaciones ferroviarias del norte y nordeste con el centro peninsular.