Caldera pide que el 50% del sueldo de los dependientes lo pague la Junta Un investigador fija en tres años la terapia a la metástasis en el cáncer de mama

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, afirmó ayer en Zamora que el Gobierno central propondrá a las comunidades autónomas que cada persona que se encuentre en situación de «gran dependencia» reciba una aportación pública de una media de 1.014 euros al mes, financiados al 50 por ciento por las administraciones central y autonómica. Caldera, que clausuró el 'Foro Zamora 2007: Un debate necesario', promovido por el Partido Socialista, anunció que la Junta de Castilla y León deberá realizar en breve la valoración de las personas afectadas por la Ley de Dependencia. Esta norma se extenderá durante el primer año de aplicación a las que tienen una mayor dependencia, que en Castilla y León se cifran en torno a las 10.000, que este año recibirán ayudas. El titular de la cartera de Trabajo y Asuntos Sociales, quien aseguró que la Ley de Dependencia es «el mayor esfuerzo de solidaridad, de humanidad y de protección social realizado en la última década en España», también anunció que los familiares de personas dependientes que quieran cuidar a los afectados «recibirán formación para ello, el alta en la Seguridad Social para que tengan pensión en su día y una ayuda económica mensual, todo ello de unos 561 euros mensuales». Así mismo, destacó que la Ley de Dependencia conllevará la creación de más de 30.000 nuevos puestos de trabajo en Castilla y León cuando esta norma se encuentre «a pleno rendimiento». Próxima aprobación Con respecto a las críticas de las comunidades autónomas sobre la escasa antelación de las convocatorias de la comisión de dependencia, Jesús Caldera afirmó que «lo importante para los ciudadanos son los 1.000 euros que les va a garantizar el servicio público y los 560 euros que se les van a dar a los familiares». Al respecto, también comentó que «no importa que se convoque un día antes o después; no merece la pena ni atenderlo. Es algo sin importancia». Igualmente, aseguró que el próximo jueves se aprobará todo: las cantidades, el mínimo del patrimonio que se necesita y las cantidades para ayuda a domicilio. No obstante, resaltó que «la Comunidad Autónoma tiene que financiar el 50 por ciento y el Estado pone otro 50 por ciento». A ello agregó que «algunos de los que critican quizá es que no quiere poner de su parte». Por otra parte, Jesús Caldera puso de relieve el esfuerzo de la Administración española para incrementar las pensiones «en 120 euros durante los tres últimos años, mientras que en los últimos años de gobierno de Aznar sólo aumentaron 60 euros». Igualmente, destacó los efectos de la reforma laboral para conseguir empleo estable, con la que se ha logrado «que el 35 por ciento de contratos precarios que se registraba cuando el PSOE llegó al Gobierno esté bajando» y la próxima entrada en vigor de la Ley de los Trabajadores Autónomos, que será aprobada el próximo mes de junio. El descubrimiento de las claves de la expansión de la metástasis del cáncer de mama del equipo científico de Joan Massagué abre una nueva esperanza a los pacientes con esta enfermedad. El subdirector del banco de ADN y del laboratorio de patología molecular del Centro de Investigación del Cáncer (CIC) de Salamanca, Enrique De Álava, asegura que, en el caso de que el estudio funcione con pacientes, en un plazo de dos o tres años podría disponerse de un tratamiento específico que evite que la metástasis del cáncer de mama llegue a los pulmones. Para el investigador del CIC, aunque el hallazgo del equipo de Massagué es «muy esperanzador», todavía debe comprobarse en seres humanos. Además, tampoco debe perderse de vista que no todas las mujeres con cáncer de mama desarrollan metástasis en los pulmones y que en muchos casos este proceso afecta a los ganglios linfáticos, el hígado o los huesos. Sin embargo, el descubrimiento supone «un paso importante», además de un «motivo de esperanza», precisó. Cuatro genes identificados De Álava recordó que hace unos años Massagué publicó en 'Nature' -la misma revista que se hizo eco del hallazgo- la selección del grupo de genes que determinaban que un cáncer de mama produjera metástasis en el pulmón. Ahora, el investigador ha identificado cuatro genes concretos y sus proteínas como los realmente claves para que se produzca este proceso y ha verificado el descubrimiento en modelos animales. «Especialmente relevantes» En este sentido, aseguró que los resultados de la investigación son especialmente relevantes si se tiene en cuenta que es cuatro el número de genes identificados, «un número abordable», y que esos genes y sus proteínas pueden inhibirse con fármacos específicos. Así, el hallazgo supondrá que, en un futuro «a medio plazo», seguramente existan «terapias dirigidas a mujeres que tengan carcinoma de mama y metástasis pulmonares». Según De Álava, «hay fármacos contra las cuatro proteínas y de alguna manera es probable que haya un tratamiento personalizado de futuro basado en ese tipo de diálogos».