La Junta pretende ejecutar su plan de Desarrollo Rural este mismo mes

Una vez concluido el periodo de alegaciones, el Programa de Desarrollo Rural 2007-2013 de Castilla y León, algunas de cuyas medidas ya están siendo puestas en marcha por la Junta de Castilla y León, comenzará a ejecutarse de manera oficial a mediados de este mes de mayo. Y es que es en torno a esa fecha cuando la Consejería de Agricultura remitirá el texto definitivo a la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea, momento a partir del cual y aunque todavía no exista una aprobación definitiva, la Unión Europea activará la financiación que le corresponde, unos 723 millones de euros de los 2.155 con los que en total cuenta el plan. Durante las últimas semanas, la Consejería ha estado revisando las alegaciones recibidas por parte de más de veinte colectivos afectados, -entre agrarios, forestales, ecologistas, grupos de acción local, empresarios y sindicatos de clase-, y ha incluido algunas de sus aportaciones. En los próximos días está prevista una reunión técnica con el Ministerio de Agricultura en la que se realizará un «examen conjunto» del plan antes de su remisión a la UE, según explicó el secretario general de la Consejería de Agricultura, Eduardo Cabanillas, quien recordó que aunque la Comisión Europea tiene un plazo de seis meses para aprobar el programa de desarrollo rural, todo apunta a que «tendremos una respuesta positiva en el mes de julio». Alegaciones En cuanto a las alegaciones recibidas, el responsable de la Consejería de Agricultura y Ganadería destaca que han predominado las aportaciones constructivas, lo que, una vez estudiadas todas ellas, permitirá «mejorar sensiblemente el plan». En concreto, la mayor parte de los colectivos han incidido en el capítulo dedicado a las medidas agroambientales por lo que la Junta de Castilla y León ha decidido reforzar estas medidas, eso sí, sin afectar a la financiación del resto de capítulos. «Lo que haremos será mejorar alguna de estas líneas y añadir más actuaciones, pero intentando respetar la financiación del resto de líneas ya que el dinero es el que es y no se puede estirar», explicó Cabanillas. En este sentido, tanto las organizaciones agrarias, como los grupos de acción local, representados a través de las asociaciones Princal y Huebra, han coincidido en reclamar, a través de sus alegaciones, la necesidad de dotar a este plan de un mayor presupuesto debido al recorte experimentado por la aportación europea.