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Un ultraligero se estrella en Segovia tras hacer escala en Villamarco

Estado en el que quedó la avioneta al estrellarse en Fuentemilanos

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León

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La policía ha identificado de forma provisional a los dos ocupantes que fallecieron ayer en el accidente sufrido por un ultraligero en las proximidades del aeródromo de Fuentemilanos y que se incendió al estrellarse contra el suelo. Se trata de dos varones nacidos en Asturias y que habían partido del aeródromo de La Morgal a las diez de la mañana. Aunque la identificación se ha realizado en base a las dos personas que salieron de Asturias, el estado en que se encuentran los cadáveres y el que se incendiara el aparato ha impedido confirmar que se trate de las mismas personas. En todo caso todo parece indicar que se trata de A.S.G., de 44 años, natural de La Felguera; y J.H.R., de Arriondas, y cuya edad se desconoce aún, según la información facilitada por la Subdelegación del Gobierno en Segovia. Según explicó Gonzalo Suárez, director del aeródromo de Fuentemilanos, donde al parecer pretendía aterrizar la aeronave, la caída se produjo a 800 metros de la cabecera de la pista de las instalaciones segovianas. La torre de control no recibió ninguna llamada de emergencia, aunque algunos de los pilotos que estaban operando en las inmediaciones llegaron a escuchar, por el sistema de comunicaciones interno, alguna voz de alarma entre los dos ocupantes. Tras partir de El Amorgal (Asturias) a las diez de la mañana, el aparato hizo escala en Villamarco, en la provincia de León, y tenía previsto aterrizar en Fuentemilanos, donde se realizan numerosos despegues y aterrizajes, sobre todo de veleros sin motor. El ultraligero era un modelo Savannah, de fabricación italiana y de color rojo y amarillo, que quedó totalmente calcinado tras incendiarse al precipitarse al suelo, con sus dos ocupantes en el interior, sobre las dos de la tarde. Hasta el lugar del siniestro se desplazaron agentes del Parque Municipal de Bomberos y la Policía Local de Segovia, miembros del Cuerpo Nacional de Policía y una ambulancia de soporte vital básico del Sacyl. También despegó de Valladolid un helicóptero medicalizado, aunque su intervención se anuló al confirmar los servicios de emergencia en el lugar del fallecimiento de ambos ocupantes. Tras ordenar el juez de guardia el levantamiento de los cadáveres, éstos fueron evacuados hasta el tanatorio.