El AVE que llegará a León en el año 2008 ya circula a modo de prueba

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, realizó ayer en un tren experimental el recorrido del trazado de la futura línea de alta velocidad Madrid-Valladolid, entre la localidad madrileña de Soto del Real y la nueva estación de Segovia, incluyendo los túneles de Guadarrama. Este trazado, según informaron fuentes del ministerio de Fomento, entrará en servicio el próximo día 22 de diciembre, como anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y se encuentra ahora ejecutado al 97 por ciento. La ministra, acompañada de los responsables de algunas empresas adjudicatarias de la obra, como el presidente de ACS, Florentino Pérez, y el consejero delegado de Sacyr Vallahermoso, Manuel Manrique, agradeció el esfuerzo realizado por estas compañías y por sus trabajadores. Asimismo han realizado el viaje con el tren experimental el presidente del Adif, Antonio González, y los delegados del Gobierno en Madrid, Soledad Mestre, y en Castilla y León, Miguel Alejo. En opinión de Álvarez, en una intervención pública en el interior de los túneles, «se trata de una de las obras más importantes realizadas en España porque permitirá avanzar en la conexión del sur con el norte y el noroeste de España», para pasar desde Madrid y Castilla y León a Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco. Magdalena Álvarez, que no realizó declaraciones a los periodistas, insistió en mostrar su satisfacción porque, en breve, será una realidad la apertura del trazado entre Madrid, Segovia y Valladolid, para avanzar después en el corredor que permita unir a España con el AVE de sur a norte. El director de la nueva línea, Rafael López Palomar, destacó que los túneles de Guadarrama «son una de las mayores obras de ingeniería de España y el primero llevado a cabo para el AVE sin ataques intermedios, situándose entre los cinco más largos del mundo y el cuarto de Europa». Con un presupuesto de más de 1.200 millones de euros, de los que más de 4.000 gastados en el conjunto de la línea Madrid-Valladolid, tienen una longitud de algo más de 28 kilómetros. En la nueva estación de Segovia el tren fue recibido por el alcalde de la ciudad, el socialista Pedro Arahuetes, y por el subdelegado del Gobierno, Juan Luis Gordo. Aquí López Palomar explicó que la nueva línea ha reducido en 68 kilómetros la distancia por ferrocarril entre Madrid y Valladolid, pasando de 248 a 180 kilómetros, con un considerable aumento de seguridad y ahorro de tiempo. El director de la línea dijo que el trayecto entre Madrid y Valladolid se realizará en una hora, aproximadamente, dos horas y media en la actualidad, mientras que a Segovia se llegará en 22 minutos, cuando ahora se consumen casi dos horas. La distancia por la línea del AVE entre Madrid y Segovia pasa de 101 a 68 kilómetros; mientras que desde la capital segoviana a Valladolid se sitúa en 111 kilómetros, 18 menos que cuando existía la vieja línea por Medina del Campo. Entre otros elementos singulares de la línea, López Palomar habló del puesto de adelantamiento y estacionamiento de trenes de Soto del Real, del viaducto de Majalahita en Miraflores de la Sierra y del intercambiador de Valdestillas, en Valladolid, que permitirá la conexión con las vías de ancho ibérico para los trenes que circulen entre Madrid e Irún. En el kilómetro 68 del trazado se encuentra la nueva estación de Segovia, ubicada entre la carretera de circunvalación SG-20 y la autopista a San Rafael AP-61, encajada en trinchera, sobre las nuevas vías.