La Ley de Dependencia supera las 15.000 solicitudes en la comunidad
El director general de Política Social y Atención a la Dependencia, Jesús Fuertes Zurita, aseguró ayer en Salamanca que la Ley de Atención a la Dependencia supera las 15.000 solicitudes en Castilla y León. Y aseguró que todo lo que la Administración regional puede realizar a favor del desarrollo de esta Ley «se está haciendo con total normalidad». Así, se refirió tanto a la presentación de solicitudes, como a las valoraciones y la revisión de los expedientes. Fuertes Zurita explicó que el nuevo marco legal se implantará de forma progresiva. En este primer año de funcionamiento se hará extensiva a las personas con gran dependencia, de las que se esperaba recibir unas 16.000 solicitudes, por lo que «poco a poco» las cifras de solicitudes realizadas y de previsiones se van aproximando. Posteriormente, precisó, la Ley de la Dependencia se abrirá a los dependientes severos, lo que podría recibir otras 12.000 solicitudes, calculó. El director general de Política Social y Atención a la Dependencia informó que en la comunidad están esperando a que se termine de cerrar el marco de cooperación y el marco normativo que tiene que rematar el Gobierno. Así, recordó que «hace falta delimitar la capacidad económica de los usuarios y rematar la acreditación de los servicios que han atendido a las personas dependientes», algo que confía en que pueda solventarse en algunas semanas. Por la integración Fuertes Zurita se desplazó a Salamanca para inaugurar la undécima muestra de trabajos realizados por discapacitados, una muestra que fue pionera en la capital charra y que posteriormente se ha exportado a otras ciudades de la Comunidad Autónoma. El objetivo de este tipo de encuentros, a juicio de Jesús Fuertes Zurita, tiene una función primordial dentro de la sociedad y es que «la ciudadanía conozca el inmenso trabajo que se realiza en el campo de la discapacidad, el esfuerzo que hacen las asociaciones y las posibilidades que tiene la gente con discapacidad». En su opinión, es un buen marco para que gente de todas las edades «vaya tomando actitudes positivas hacia la integración». La feria, en la que pueden comprarse trabajos de encuadernación, portafotos, pisapapeles, abanicos decorados, plantas e incluso almohadas cervicales reúne a un total de 27 asociaciones, siete entidades públicas y dos empresas privadas. Además, también participa el Cercig, una entidad portuguesa que trabaja dentro de un proyecto de cooperación educativa.