El nuevo Consejo de la Emigración apoyará la labor de las casas regionales

El consejero de Interior y Justicia, Alfonso Fernández Mañueco, presidió ayer la constitución del Consejo de la Emigración, el «órgano consultivo» para las políticas que afecten a los castellanos y leoneses que viven fuera de la comunidad, sus hijos y descendientes. El objetivo es «fomentar la participación de estas personas en los asuntos que puedan ser importantes» y que, a su vez, «ayuden» a la elaboración de un Plan Integral de Apoyo a los castellanos y leones que habitan fuera de la comunidad, que verá luz a finales de 2008. Así lo explicó Fernández Mañueco instantes antes de que se celebrara la reunión de este Consejo en el que están representadas las 120 casas de Castilla y León, así como la Federación Regional de Municipios y Provincias, las universidades públicas de la comunidad, y todas las consejerías que tienen algo que ver con esta materia. Se trata de cumplir con un «compromiso» del presidente de la Junta, que ha mostrado una especial sensibilidad con los castellanos y leoneses que viven en otras latitudes, según precisó el consejero. El Consejo de la Emigración comenzará a trabajar a partir del próximo mes de enero, cuando desde la Consejería se remita un borrador del mismo para que sus miembros y las personas a las que representan puedan aportar sus ideas y sugerencias. El consejero, que explicó las principales líneas de actuación de este órgano, lo hizo acompañado de los representantes de las casas de Castilla y León en Cuba, Argentina, Madrid, País Vasco y Cataluña. Entre los ejes fundamentales del Plan está la mejora de la atención socio-sanitaria y asistencial de todos los ciudadanos, la educación e integración socio-laboral, la participación cultural y el intercambio, la información y la integración en la sociedad digital y potenciar el movimiento asociativo. Algunas medidas concretas En este sentido, manifestó que algunas de las medidas serán para todos los ciudadanos de Castilla y León y otras sólo para los que viven fuera de España. En concreto, señaló que se mejorarán las sedes de las casas de Castilla y León existentes y se constituirán otras nuevas para «potenciar el acceso a la cultura y a las nuevas tecnologías» y que se conviertan en un lugar de «encuentro, de intercambio y participación» y, sobre todo, en el que los jóvenes puedan «conectarse al lugar del que proceden sus padres y abuelos». Por otro lado, Mañueco avanzó que quieren que estas casas que actualmente actúan como entidades colaboradoras de la Junta de Castilla y León, sean también agentes de cooperación al desarrollo.