Por el entendimiento

Castilla y León celebró ayer sus 25 años como autonomía, un camino de «aprendizaje activo de la democracia» donde sus representantes y ciudadanos comprendieron el valor «del acuerdo, la negociación y el pacto». Así definió el actual presidente de las Cortes, José Manuel Fernández Santiago, un cuarto de siglo de comunidad, en unas bodas de plata donde no faltó ni el brindis para que Castilla y León ahora refuerce la senda emprendida hace un cuarto de siglo. Este año la celebración fue especial: un nuevo edificio para una nueva reforma, que muchos de los invitados calificaron como la del «consenso y el entendimiento». El salón de los Pasos Perdidos se quedó pequeño para una multitudinaria representación de la vida pública y social. La celebración arrancó con un homenaje a la historia, a esos '25 años de Autonomía de Castilla y León. Democracia y autogobierno', con la inauguración de una muestra -a cargo del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera,- que permanecerá abierta al público en el hall de las Cortes hasta el próximo 30 de abril. Tras el recorrido oficial por la muestra llegaron los discursos en clave de futuro.