Los obispos piden que no se imparta en ningún colegio de las diócesis de Castilla y León El SUP alerta de un déficit de quinientos policías en la comunidad

Los Obispos de la Iglesia en Castilla y León señalaron ayer que están «en espera de que la asignatura Educación para la Ciudadanía no se aplique en nuestras Diócesis en la forma que está programada y que ha sido ya desautorizada por las sentencias de varios tribunales civiles». Así lo reflejan en un comunicado que consta de cinco puntos con el que se han dirigido a los «fieles» de sus diócesis. En el primero de los apartados, explican que «el Estado no puede imponer legítimamente una formación de la conciencia de los alumnos al margen de la libre elección de los padres, tal como tiene prevista la asignatura Educación para la Ciudadanía y los Decretos que desarrollan la Ley, que pretenden formar con carácter obligatorio la conciencia moral y cívica de los alumnos». A continuación comentan que el derecho de los padres a elegir el tipo de formación moral y religiosa para sus hijos «es primordial, insustituible e inalienable, como reconoce el artículo 27.3 de la Constitución Española», y que «las enseñanzas orientadas a la formación de la conciencia moral no son competencia del Estado», sino de los padres y escuelas. El Sindicato Unificado de Policía (SUP) considera que existe un déficit de unos 500 policías nacionales en Castilla y León, ya que muchas de las plazas vacantes de las plantillas provinciales están sin cubrir y la Dirección General de Policía «lleva diez años sin hacer movimientos en la cifra» de agentes que prestan su servicio en la comunidad autónoma. Así lo manifestó ayer el secretario de la Comisión Ejecutiva del SUP de Segovia, Juan Francisco Antona, durante la firma del protocolo que unificará la acción del sindicato policial y la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). En Ávila, existe una plantilla de 160 policías nacionales, si bien unas 30 plazas están vacantes. «Nos tienen abandonados», lamentó Antona. Por su parte, la AUGC también recalcó que la plantilla de la Guardia Civil, si bien se ha cubierto durante los últimos años en cuanto a plazas vacantes, aún es «escasa». En la provincia de Ávila, según el secretario provincial de esta asociación, Antonio Jiménez, se estima «que son necesarios un centenar de agentes más de los 550 que existen.