Oro para los pioneros

La comunidad vivió una de sus jornadas más intensas e históricas el pasado miércoles. En el año en que cumple su cuarto de siglo de vida, las Cortes de Castilla y León quisieron reconocer el trabajo y la labor de todos aquellos que pusieron sus esfuerzos en dar forma a una sociedad que sigue en continuo crecimiento y cambio. El Parlamento autonómico entregó la Medalla de Oro de las Cortes a los ex presidentes de dicha institución y de la Junta. Según recoge el Reglamento de Honores y Distinciones de las Cortes, se trata de la más alta distinción del Parlamento, y reconoce la labor de personas o instituciones «que reúnan méritos especialmente relevantes o que hayan prestado servicios sobresalientes a la Comunidad». Tal es el caso de los premiados, aquellos que en algún momento desempeñaron los cargos de presidente de las Cortes o de la Junta de Castilla y León. La decisión de entregar estas medallas fue tomada por la Mesa de las Cortes durante la pasada legislatura. La celebración del 25 Aniversario de la aprobación del Estatuto de Autonomía parecía el marco idóneo para escenificar esta distinción. Además, se conmemoraba otra efeméride: la constitución de las primeras Cortes el 21 de mayo de 1983, en el Monasterio de las Claras en Tordesillas. El presidente de las Cortes, José Manuel Fernández Santiago, quiso destacar en su discurso «la política constructiva sustentada en valores democráticos» que lideraron los homenajeados. Un trabajo que, sin duda, estuvo plagado de «sinsabores, dificultades y problemas» para hacer de Castilla y León una sociedad «democrática, abierta, responsable y madura». Fernández Santiago señaló que «España no trata bien a sus mejores hombres y mujeres» por lo que con el acto de entrega de las medallas reconoce «la impagable contribución de estos hombres para situar a Castilla y León en el lugar que le corresponde». Dionisio Llamazares, Carlos Sánchez-Reyes y Manuel Estella -ex presidentes de las Cortes- y Demetrio Madrid, José Constantino Nalda, Jesús Posada y Juan José Lucas -ex presidentes de la Junta- recibieron las Medallas en un Hemiciclo abarrotado en el que se dieron cita más de 300 invitados. Sin embargo, hubo un hueco, el que dejó José María Aznar, quien fuera también presidente de la Junta de Castilla y León y el único en llegar a la presidencia del Gobierno, que no pudo acudir al evento por problemas de agenda. Entre los invitados no podía faltar el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, quien dedicó cariñosas palabras a los homenajeados. Herrera quiso mostrar su afecto a los ex presidentes, de quienes aseguró sentirse «orgulloso». Además, señaló que la referencia de los ex presidentes a «quienes les ayudaron -trabajadores, profesionales y compañeros- hace que este acto sea grato y necesario». El presidente concluyó su intervención asegurando que estaba «feliz» por el ánimo de los premiados «para seguir empujando». El acto se completó con la II Jornada de Puertas Abiertas celebrada durante el fin de semana que dio la posibilidad a todos los ciudadanos de poder conocer de cerca el Parlamento.