Diario de León

Madrid exige que se compense el aumento de población y Castilla y León la dispersión geográfica

Herrera y Aguirre discrepan sobre el peso poblacional en la financiación

Ambos presidentes, de acuerdo en que el modelo se base en la «igualdad, suficiencia y solidaridad»

Herrera y Aguirre, durante la firma del convenio

Herrera y Aguirre, durante la firma del convenio

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Beatriz S. Olandía - valladolid
León

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Juan Vicente Herrera y Esperanza Aguirre presiden dos comunidades autónomas antagónicas en sus características, una circunstancia que les hará defender posturas enfrentadas en el debate de la financiación autonómica. Mientras Castilla y León está condicionada por su extenso territorio y la dispersión y envejecimiento de su población, Madrid posee un alto número de habitantes concentrados en un territorio mucho menor. Aunque ayer coincidieran en abogar por un modelo basado en los principios de «igualdad, suficiencia y solidaridad», el fondo del debate separa a los presidentes. Herrera volvió a reiterar la importancia de llegar a un sistema «que garantice la igualdad de los ciudadanos», para lo que apostó por que la población no pese más del 80%, y el 20% restante se ligue a la dispersión. Esta petición ya fue trasladada al presidente del Gobierno en la reunión de la semana pasada y, a falta de una postura oficial, parece que desde La Moncloa es vista con buenos ojos. Consenso entre todos Esperanza Aguirre, por su parte, aseguró que el peso de la población se consensuará «entre todos» y defendió la creación de los instrumentos necesarios para compensar el crecimiento poblacional, un hecho que ha caracterizado a la Comunidad de Madrid. Tal y como recordó la propia Aguirre, «Madrid ha ganado un millón de habitantes desde la última revisión de la financiación autonómica y debe poder compensarse esos aumentos». Además, apuntó, ese aumento de la población conlleva un incremento del gasto en servicios básicos como en sanidad, educación o servicios sociales que no se ve recompensado con lo recaudado a través de los diferentes impuestos, dado que una gran parte de ellos van a parar a las arcas del Estado. En este punto, Herrera apuntó que los impuestos no los pagan los territorios, sino los ciudadanos y, por ello, reiteró el papel del Gobierno central como garante de la solidaridad. Ante el choque de posturas, Herrera intentó mitigar el debate y, de forma conciliadora, destacó la labor solidaria que ejerce la Comunidad de Madrid con el resto del país, «y tenemos un ejemplo en este convenio».

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