La judicatura centra en el acceso a la formación su principal queja

El Consejo General del Poder Judicial elaboró este año también otro informe para detectar los problemas que tienen los jueces para acceder a la formación continua que ofrece el propio el Consejo. Así, tanto en el conjunto de España como en Castilla y León, el principal problema nombrado por los jueces radica en la falta de nombramiento de un sustituto, ya que los jueces se han referido a esta circunstancia en un 40 por ciento y en un 42 por ciento, respectivamente. Por detrás se sitúa en la comunidad el exceso de trabajo del departamento, con el 13 por ciento, así como la compatibilidad con el trabajo, mencionado en el diez por ciento de las ocasiones, y la conciliación de la vida familiar, en el nueve por ciento. Condiciones laborales Por otra parte, en lo que se refiere a las condiciones físicas del lugar de trabajo, la calificación de los jueces ha mejorado entre 2005 a 2007 tanto en España, como en Castilla y León, y han pasado de no aprobar a superar el cinco. Sin embargo, la comunidad superó la media nacional y, de hecho, se posicionó como quinta de España que recibe mejor nota por parte de sus jueces. Así, este capítulo -que valora la luminosidad, las comodidades, el mobiliario y el espacio disponible, entre otras cuestiones- obtiene en 2007 en Castilla y León una puntuación de 5,73, casi dos puntos más que hace dos años, cuando recibió un suspenso, con un 4,83. Mientras tanto, la media nacional pasa también de un 4,83 a un 5,45 por ciento. La mejor puntuación fue para el País Vasco, que consiguió una nota de 7,29, y mejora respecto a 2005 (6,26); por detrás se situó Navarra, con un 6,9; Aragón, con un seis, y Castilla -La Mancha, con un 5,88. En este apartado del informe se pone de manifiesto, otra vez más, las diferencias entre las comunidades autónomas, así como también entre las diferentes jurisdicciones. Y los juzgados de Primera Instancia e Instrucción se hacen con la peor nota y no llegan al aprobado, con un 4,86. Tampoco llegan al cinco los tribunales superiores de justicia, con un 4,93.