Mañueco defiende las diputaciones como más ágiles que las comarcas

El consejero de Interior y Justicia, Alfonso Fernández Mañueco, defendió la apuesta de la Junta de Castilla y León por las diputaciones, los ayuntamientos, las mancomunidades y los consorcios que permiten la unión de los servicios, «frente a otras fuerzas políticas, como el Partido Socialista, que apuestan por la comarcalización». «Nosotros apostamos desde el Partido Popular por las diputaciones y los ayuntamientos porque son fórmulas más ágiles, más apegadas al terreno y que aportan más eficacia. En cambio las comarcas en esta época de crisis van a introducir mayor confusión, gasto público y mayor despilfarro», sentenció el consejero de Interior y Justicia. En este sentido, Mañueco insistió en el compromiso económico de la Junta de Castilla y León para con las juntas locales que contrasta con «palabras como las del ministro Solbes que señaló que va a recortar las inversiones para las corporaciones locales en toda España, lo que supondrá unos 45 millones de euros en Castilla y León». Y señaló que desde la Junta «se han duplicado por más de dos puntos y medio las cantidades destinadas a las corporaciones locales». El consejero realizó estas declaraciones en los actos del Día de la Provincia de Salamanca, que celebra «el día de los alcaldes, de la Diputación y de los 362 ayuntamientos que componen la provincia de Salamanca», precisó. Y recordó la importancia de todas las corporaciones locales que «sostienen servicios muy esenciales para los ciudadanos como los culturales, educativos o deportivos». Para los alcaldes Por eso, quiso recordar como los alcaldes «a veces desarrollan su labor en condiciones difíciles, por eso es grato sumarse a esta celebración y continuar con la tradición de San Mateo en Salamanca». Por su parte, la presidenta de la Diputación de Salamanca, Isabel Jiménez, señaló en su discurso su propósito para que «el Día de la Provincia no sólo sea de exaltación institucional, sino un día de intercambio de opiniones sobre el papel que le corresponde desarrollar a las administraciones locales en función del nivel de responsabilidad asumida en cada gestión». Una gestión pública a la que, como señaló la presidenta, afectará «la crisis económica».