Los grupos firman el manifiesto contra las 65 horas laborales
Las Cortes de Castilla y León decidieron el pasado martes unirse a los sindicatos en su oposición a la directiva europea que propone revisar la normativa sobre el tiempo de trabajo aprobada en 1993. Dicha revisión permitiría aumentar hasta 65 horas la jornada laboral en todo el territorio europeo. El manifiesto, firmado por los portavoces de los tres grupos parlamentarios -Carlos Fernández Carriedo por el Partido Popular, Ana Redondo por el Partido Socialista y Joaquín Otero por el Grupo Mixto-, sostiene que la decisión tomada por el Consejo de Ministros de la Unión Europea supondría un «significativo paso atrás en materia de protección de los derechos de los trabajadores», quebrando garantías consagradas en el Tratado y en la Carta de Derechos Fundamentales. Las Cortes dicidieron plasmar en un documento su radical oposición al texto europeo y «apoyar el posicionamiento de las organizaciones sindicales contra la modificación de la Directiva, que constituye en sí misma un evidente retroceso en los derechos sociales consolidados y reconocidos a los trabajadores». Además, las Cortes consideran que «la negociación colectiva debe ser el instrumento básico de articulación de las condiciones de trabajo, en términos que hagan posible la racionalización de la duración de la jornada y la necesaria conciliación de la vida laboral y familiar, como derecho básico». Por último, el manifiesto sindical reconoce el Diálogo Social «como medio para la adopción de acuerdos que afecten al ámbito económico, social y laboral».