De la Vega insiste en que el cierre de Garoña es «definitivo»
Mariano Rajoy califica las actitud del Gobierno de «errática y caprichosa» ante la decisión de cerrar la central nuclear
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró que el cierre de la central de Santa María de Garoña (Burgos) es «definitivo», ya que tiene «una fecha determinada: el 6 de julio» de 2013. Además, aseguró que si el próximo Gobierno da marcha atrá1s al cierre de la central, «no sería nada razonable» y explicó que la decisión «lleva consigo una orden ministerial por la que se ordena el cese definitivo».
Asimismo indicó que esta medida se tomó «con rigor y con responsabilidad» y remarcó que el cese es una decisión «política y jurídica», adoptada en función de criterios que tienen que ver con la política energética, criterios técnicos, criterios de seguridad, criterios económicos y medioambientales, «que han llevado al Gobierno a tomar esa decisión, que nunca es fácil».
Asimismo, Fernández De la Vega adelantó que en los próximos años se van a llevar a cabo «medidas que van a ir dirigidas a ese cese», como que «no se va a permitir hacer inversiones que no sean para garantizar la seguridad, no se va a permitir hacer más acopio de energía, y se va a exigir a la empresa que en diciembre de 2011 presente el plan concreto de cierre».
Finalmente, la vicepresidenta primera señaló que el ejecutivo central ha hecho una apuesta clara por las energías renovables, lo que no significa que vaya a cerrar todas las centrales nucleares. De este modo, explicó que «no se van a construir centrales» y que las que hay se mantendrán «mientras dure su unidad de diseño».
Errática y caprichosa. El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, tachó de «errática y caprichosa» la política energética del Gobierno de Zapatero por haber ordenado el cierre de la central nuclear de Garoña para 2013, en lugar de seguir el consejo de los técnicos y prorrogar la licencia por diez años más.
Durante la clausura de los cursos de verano de la Fundación FAES junto al ex presidente del Gobierno José María Aznar, Rajoy ironizó que el cierre de Garoña demuestra que «los errores del Gobierno van en serio» y no son una casualidad.
Rajoy criticó que el ejecutivo central haya aprobado el cierre de la central nuclear sin explicar a los ciudadanos que «la economía tendrá un perfil bajo si no abordamos la dependencia exterior de energía» que tiene España.
El líder de los populares aseguró que poner fin a las actividades de la central nuclear de Santa María de Garoña es «un lujo muy caro que vamos a pagar todos los españoles» y que pone en «franco riesgo» la competitividad de la industria de todo el país.
Mariano Rajoy huyó de una «confrontación» entre partidarios y detractores de la energía nuclear, pero abogó por abrir un debate «con expertos» en la opinión pública sobre esta clase de energía.
El líder del Partido Popular defendió que España necesita un «mix energético» que permita desarrollar el empleo, la competitividad, el bienestar, la riqueza de los españoles y la protección del medio ambiente.