«El rubio», en la cárcel por una condena del 2003, no por su última detención
El juez ordenó ayer la libertad provisional a Amancio García Carro, conocido como «El rubio», por las investigaciones que han llevado a su reciente detención en Benidorm (Alicante), pero seguirá en prisión por una condena pendiente de ejecutar de la Audiencia de Salamanca del año 2003.
El Ministerio Fiscal ha pedido su libertad, a la que ha accedido el titular del Juzgado de Instrucción número 4, que ha llevado la «Operación Atalaya» y que llevó a su detención por asuntos relacionados con narcotráfico, tenencia ilícita de armas y falsedad en documento oficial.
Se trata, según dijo el pasado sábado el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, de un miembro de un clan de mercheros que tenía a sus órdenes a un grupo de personas que se dedicaba, principalmente, al tráfico de drogas.
Aunque el juez mantiene el secreto de las actuaciones, el abogado de la defensa aseguró que García Carro se ha negado a declarar en «muchas de las preguntas que se le han hecho».
Al mismo tiempo, el letrado afirmó a Efe que será ahora la Audiencia Provincial de Salamanca la que tenga que realizar «una liquidación de condena», ya que seguirá en prisión por una causa de 2003.
«El rubio» sigue en la prisión de Topas y su estado es «bueno» según su abogado defensor.