Los castellanos y leoneses pagarán 663 millones más por la subida de impuestos

La Junta de Castilla y León valoró ayer el impulso y el esfuerzo inversor al AVE en los Presupuestos Generales del Estado del 2010 para la comunidad autónoma y criticó el «frenazo» que se produce para autovías y autopistas por la reducción de la partida para carreteras, en particular para las «dos clásicas», la Autovía del Duero que «sigue bloqueada» la Autovía León-Valladolid con un aportación «decepcionante». Esta es la lectura que trasladó el consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que calificó de «poco o nada creíbles» los ingresos que presenta el presupuesto del Gobierno y de «caóticos» los gastos porque doblan lo que prevén ingresar.

Respecto de las dos autovías, De Santiago-Juárez recordó que eran compromisos adquiridos por el ministro de Fomento, José Blanco, durante su visita a Valladolid, por lo que atacó al líder autonómico socialista, Óscar López, por decir que Castilla y León representa el 10 por ciento de las inversiones totales cuando su población es el 5 por ciento.

En tal sentido, preguntó a López desde cuando se mide la inversión de las obras viarias por la población en vez de por la extensión territorial y le pidió que repase el Estatuto de Autonomía para comprobar el «olvido» sobre lo que marca la máxima norma de la Comunidad. «Si se compara con la extensión territorial, igual está en último lugar», apostilló.

También censuró que en las cuentas estatales no figure una partida para la comarca de Garoña como alternativa al cierre de la central así como el parador que se ofreció como una de las medidas para la zona. De Santiago-Juárez estimó que la partida del Plan Plurianual de Convergencia Interior está «confusa», dado que «se visualizan» 75 millones y los otros 75 llegarán por una transferencia finalista. «Es un compromiso, y nos fiamos», aseveró. «No son unos buenos presupuestos para España, ni para hacer frente a la crisis, son mediocres, imprecisos, poco creíbles y decepcionantes para Castilla y León», valoró, para después centrar la critica en que se vaya a gastar más que ingresar, lo que «produce pánico».

A este cúmulo de calificativos, el consejero añadió que el Gobierno «quiere tensionar» a las comunidades con la negociación que abre para la aprobación de su proyecto.

En este sentido, criticó que se quiera «blindar» el concierto vasco, lo que perjudicará a comunidades de Castilla y León cuando recurren la bajada del impuesto de sociedades por parte de las diputaciones forales vascas.

1397124194 Clase media. Entre las criticas, subrayó que las «ocurrencias» del presidente del Gobierno y la subida de impuestos van a ser un «sacrificio» para las clases medias, y no para las rentas más altas como en un principio se apunto, y recordó que la subida de impuestos supondrá 663 millones de euros más para trabajadores, pensionistas y desempleados de la Comunidad, según el cálculo que han realizado, de los que 322 proceden del incremento de dos puntos del IVA.

Poco creíbles en el estado de los ingresos y de los gastos, penalización para la clase media, incoherentes y confusos en las medidas de protección social y medidas para hacer frente a la crisis, no son sociales porque se reducen las aportaciones a las comunidades que son las que gestionan la educación, la sanidad y los servicios sociales y penalización de los ministerios, como el de Ciencia y Tecnologías, que representan el cambio de modelo económico al que se quiere ir fueron las valoraciones generales que realizó.