Herrera explica que «estos procesos o son asumidos por todos o van hacia el fracaso»

El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, aseguró ayer que estos 26 años de autonomismo han sido «buenos» para Castilla y León como «proyecto» pero también para los «castellanos y leoneses y sus familias». Por ello, sostuvo que le da pena y «profunda rabia» que algunos no lo estén defendiendo con «vigor» y «valor» desde los «excesos» o desde una «óptica centralista».

«Castilla y León cree en ese autonomismo útil para la personas y las familias e integrador en el conjunto de España», precisó. En este sentido, precisó que la comunidad no es un «proyecto artificial», «de repartos» sino «perfectamente compatible también con el sentimiento de lo local».

Herrera dijo que cree en «Castilla y León en clave de futuro» porque «tiene mucho más futuro que pasado», aunque tiene una «apabullante historia», y en esa dirección indicó que es conveniente hablar también en clave «autonómica». «Creo que la ordenación territorial, que nace de la Constitución, y que el modelo autonómico, ha sido un buen invento para la convivencia y para el progreso de España, de las españas, de España concebida como nación, pero también España consciente de un sentimiento plural y diverso», sentenció.

No obstante, recordó los valores que movieron e hicieron la transición y ese «enorme» ejercicio de «voluntad, generosidad e inteligencia» que hizo que en aquel momento se renunciará a determinadas cosas en «pos de un objetivo común» de dar «un salto adelante». Y lamentó que hoy algunos «quieran «reabrir esas viejas contiendas que en aquel momento quedaron satisfactoriamente resultas». «Estos procesos o son asumidos por todos y cada uno de los ciudadanos y por la sociedad civil o no dejan de ser intentos artificiales y estériles que van hacia el fracaso», agregó, al tiempo que afirmó que los ciudadanos la perciben como una administración «útil a su servicio».