El PSOE propone un pacto autonómico para luchar contra el cambio climático
Propugna un acuerdo con partidos políticos, agentes sociales y económicos y la ciudadanía para que la comunidad sea un ejemplo para parar los efectos nocivos
El secretario de Desarrollo Rural y Medioambiente del Partido Socialista de Castilla y León, Manuel Fuentes, tras la celebración de la Cumbre de Copenhague, propone un gran acuerdo de ámbito autonómico en el que el conjunto de la comunidad se comprometa a planificar y desarrollar las medidas que entre todos se acuerden.
En el pacto deberían participar partidos políticos, agentes sociales y económicos y toda la ciudadanía de Castilla y León, «hasta el ultimo vecino de cualquier municipio debe y podrá contribuir a este acuerdo», indicó en un comunicado.
El Partido Socialista de Castilla y León llevará la propuesta en forma de iniciativa parlamentaria a las Cortes de Castilla y León y también la presentará para su análisis y contribución al Consejo Económico y Social de Castilla y León.
«Debe ser un trabajo de todos y todas pero en el que la Junta de Castilla y León debe estar a la altura de las circunstancias y pilotar esta iniciativa para que sea eficaz y urgente y, sobre todo, no sirva como elemento de batalla partidista sino de unión y trabajo en un objetivo común».
Según el informe de evaluación preliminar general de los impactos en España del cambio climático (ECCE), tanto el país como Castilla y León son muy vulnerables. El estudio refleja que la Península Ibérica ya se está viendo afectada y prevé aumentos de las temperaturas máximas y mínimas a lo largo del siglo de entre 3 y 4 grados, en la perspectiva más favorable, y un descenso de las precipitaciones de entre el 5 y el 15 por ciento, de aquí la necesidad de tomar medidas.
El PSCyL recuerda, además, que los impactos del cambio climático pueden tener consecuencias económicas especialmente graves en Castilla y León. La disminución de los recursos hídricos, puede provocar problemas en la agricultura y ganadería, la pesca, el suministro doméstico, el turismo y la industria.
Asimismo, indica que el aumento de las temperaturas puede conllevar pérdidas de fertilidad de los suelos, modificación de los calendarios y destinos turísticos, aumento de las olas de calor, disminución de la productividad en la agricultura y bosques y aumento de la demanda hídrica.
Las emisiones de gases efecto invernadero aumentaron en Castilla y León hasta el 123,9 por ciento en los últimos años, respecto a las emisiones de 1990. Además, la comunidad emite el diez por ciento de los gases contaminantes del país, con una población y un PIB del 5-™5 por ciento. Es más, la emisión por habitante es casi el doble (17-™4 MtCO2 eq) que la media.