El obispo de Ávila apoya que Arévalo acoja las «Edades del Hombre»
García Burillo reconoce que es «un deseo difícil de conseguir» debido a la crisis económica
El obispo de Ávila, Jesús García Burillo, reiteró ayer su apoyo a la propuesta de la localidad morañega de Arévalo de acoger una nueva edición de Las Edades del Hombre, aunque reconoció que es «un deseo difícil de conseguir» en tiempos de crisis debido a los altos costes derivados de la organización de una exposición de este calado, y que deberán asumir las entidades que decidan liderar el proyecto.
«Es preciso que aquellas entidades que demanden esta exposición estén dispuestos a tener todos los gastos», advirtió el prelado en la tradicional felicitación navideña, a la hora de organizar una edición de Las Edades del Hombre, como propuso la asociación cultural -˜La Alhóndiga-™ y ha respaldado el Ayuntamiento de Arévalo.
Sin embargo, recordó, pese a los costes, la muestra es también un «regalo económico» para el lugar que la acoge y sería, opinó, «un gozo» y no sólo para él -”añadió-” sino también para el abulense Carlos López, presidente de la Fundación Las Edades y obispo de Salamanca.
En su tradicional mensaje navideño, el obispo de Ávila se centró en el «significado» del acto del domingo, en el que se quiere poner de manifiesto «el valor de la familia», que calificó de «extraordinario» y del que aseguró que «se proclama en público y no sólo en el corazón del hombre».
Así, Madrid, según el prelado abulense, se convertirá mañana en «el corazón de Europa», pues acudirán «muchas familias y muchos obispos de fuera» y también «muchos cardenales que vienen de toda Europa», porque «todo el mundo tiene la misma sensibilidad de que la vida es el gran don que Dios da al ser humano», y que «necesitamos reconocerlo y valorarlo», y «que la familia sea un valor reconocido, especialmente en este momento».
«No queráis una Navidad sin Vida, acoged en vuestro hogar y en vuestro corazón a Jesús; no queráis una Navidad sin familia, dejaos acompañar de María y de José, no queráis una Navidad sin Luz, la estrella de vuestra fe os llevará a Belén», pidió el obispo.