«Puede que reúna a personajes de León y monte una historia»

Félix de la Concha vive entre Estados Unidos y España, con León como punto de referencia. Hay un proceso creativo, marca de la casa, que abarca un todo y que se convierte en su infinita y monumental obra. Son esos retratos en los que aparece volcada toda la existencia, sus huellas, el pasado y el presente, los surcos de la vida. Hoy, el leonés estrena en Bilbao (Galería Catálago General) la exposición titulada La historia más larga de Bilbao jamás pintada , y que consiste en retratos realizados alla prima (una sola sesión de dos horas) a siete ancianos bilbaínos. Al mismo tiempo que posaban, el pintor mantenía con ellos una conversación en torno a su vida y recuerdos sobre la ciudad. Todo ello quedó grabado en vídeo. Con este material gráfico, Félix de la Concha realizó un corto que se presentó en la última edición de Zinebi, y actualmente está siendo seleccionado a concurso en diferentes festivales de EEUU. En definitiva, el viaje del arte. Félix de la Concha parece decidido: retrata la vida.

- En un proyecto como este de Bilbao, ¿cuál es el hilo conductor: la gente a la que retrata, o la propia ciudad vasca?

-Había hecho otro proyecto en Bilbao pintando el Mercado de la Ribera en el 2008 y me quedé muy prendado con la ciudad. Preguntamos en el censo del ayuntamiento por los más longevos, pero es información reservada. Así que los ancianitos los encontramos rastreando entre asilos y abuelos de amigos. La primavera pasada se casaba allí un amigo y lo hice coincidir con ese viaje a España. Doña Vicenta es la abuela de la novia, una emigrante de Palencia casada con un guardia civil y con una historia muy emotiva.

-¿Quedó satisfecho del resultado final?

-Quedó un grupo de lo más variopinto. El reto fue reducir todas esas horas de grabación para montar un cortometraje, ya que quise que se estrenara en Zinebi el pasado otoño, que es un festival de cortos. La respuesta del público con su proyección en el teatro Arriaga fue sorprendente. Alguien me dijo que fue la primera vez en el festival que la gente aplaudía antes de que acabara.

- ¿Este proceso de trabajo supone para usted una veta creativa de largo recorrido?

-Realmente sí, porque me ha abierto posibilidades insospechadas. Empezó como un experimento pictórico y luego resultó de mayor calado. Por un lado está la pintura, por otro el testimonio, y luego el proceso. Hay un registro del acto de la pintura y a la vez de la palabra. Otro tema en el que también estoy indagando es en el de la música.

-De estos personajes, ¿qué le ha impresionado más ?

-Me sentía cómodo con ellos. Quizás porque después del largo proyecto que había hecho con sobrevivientes del Holocausto, estaba ya acostumbrado a tratar a personas mayores. Tienen ganas enormes de contar, y a su edad ya están de vuelta de todo.

-El del hombre que fue maquillador del Arriaga, ¿fue de los más curiosos?

-Don Amador tiene ahora 102 años. Como hablaba tan bajito, mucho de lo que me contó sólo lo pude entender cuando procesé la grabación del audio. También fue muy sorprendente su visión de la política, como el tema de la lengua, tan enrarecido en el País Vasco. Son de una generación donde hablar Euskera estaba mal visto porque solo era hablado por los aldeanos.

-¿Tiene previsto algún proyecto parecido para León?

-Este lunes se presentó en León el último número de la revista Turia, dedicado a Luis Mateo Díez. Me encargaron las ilustraciones, donde metí vistas de León, y en la portada viene el retrato de Luis Mateo, que fue uno de los primeros que hice usando el formato de grabar la conversación durante la pose. En Madrid me han llegado a acusar de leonesismo. En la exposición que hice en el Museo de Arte Contemporáneo expuse a unos doce leoneses. Muchos, escritores, de los que esta tierra es tan fértil.

-Un proyecto como este que inaugura es propicio para una nómina tan alta de ilustres-¦

-Por los pelos no pille a Victoriano Crémer, con ya 102 años. Mi madre se lo propuso un día que se lo encontró en la calle. A los dos días murió. Recientemente pinté y grabé al abad emérito de San Isidoro, Antonio Viñayo. Me contó toda su vida. Quién sabe si algún día reúna a varios personajes de León y monte otra historia...

-Con un pie en EE. UU. y otro en España, ¿hasta qué punto la crisis ha modificado el planteamiento actual del arte?

1397058884 No lo sé. Supongo que se notará más en España, donde la crisis es mayor y muchos planteamientos dependen de las instituciones públicas. Un ejemplo es Arco, una pura contradicción.