«Cada día las señoras de la limpieza del Musac tenían que decidir qué era arte»

El Musac reabre hoy sus puertas, de 17.00 a 22.00 horas, para mostrar al público lo que han dado de sí cuarenta días de encierro de los artistas vascos Txomin Badiola, Jon Mikel Euba y Sergio Prego junto a quince voluntarios. La iniciativa, denominada Proforma, ha ido cambiando día a día las exposiciones iniciales de los citados artistas vascos, inauguradas el 30 de enero. Un trabajo «nada placentero, tumultuoso y convulso», según Prego. Una experiencia en la que han mostrado todos sus «trucos», aseguró ayer Txomin Badiola, lo cual ha tenido un efecto «liberador». «Te das cuenta de que esa ocultación que parece definir al artista, cuando lo enseñas todo, eres más tú». Badiola reconoció que cuando se plantearon participar en el proyecto ideado por el director del Musac, Agustín Pérez Rubio, «la principal cuestión era que había que incorporar la idea de fracaso». No sabían si realmente serviría para algo tanto esfuerzo. «Nuestro planteamiento no se basaba en algo sólo discursivo, pretendíamos funcionar desde un planteamiento ético». En un alarde de sinceridad, Badiola reconoció que «cada día las señoras de la limpieza tenían que decidir qué era arte o no». Además, «siempre que se quiere reivindicar la posición del artista se hace desde una postura discursiva y nosotros lo hemos hecho desde la práctica». Badiola aclaró que «teniendo en cuenta las rigideces a las que estamos sometidos los artistas en todas las operaciones que tienen que ver con el arte, esta experiencia no se puede definir más que como un pequeño milagro».

A lo largo de 40 días por el Musac han desfilado artistas invitados, caballos, perros adiestrados y público en directo-¦ que han «interactuado» y transformado las exposiciones. «Ha sido sobrehumano», en palabras de Euba. El resultado es imposible de mostrar al completo, porque han desarrollado la producción equivalente a dos años de trabajo. «Tenemos un material brutal», dijo Euba, hasta el punto de que «la exposición actual sólo refleja el 10%».

¿Qué ha cambiado en 40 días? Según Euba, «todo tiene ahora un grado de naturalidad que no se podría conseguir de otra forma». El Proforma ha sido seguido desde los lugares más insólitos, a través del blog creado expresamente por el Musac para ir mostrando día a día todas las intervenciones y todos los cambios. El Proforma empezó con mal pie. Horas antes de inaugurar las exposiciones, Pérez Rubio se fracturaba una pierna al caerle encima una de las piezas. «Nos sentimos huérfanos», declararon los artistas. «Fue un shock», dijo Badiola, aunque reconoció que «por alguna razón, pudimos llevarlo a cabo».

El museo patas arriba. El encierro ha obligado al trío vasco a sacrificios personales. «Sergio, que vive en Nueva York, no pudo ver a sus hijos en 40 días», contó Euba, quien añadió que «perdimos los papeles, porque en 40 días hemos movido todo el museo». Prego reconoció que «ha sido una experiencia excepcional. No ha habido nada convencional en el planteamiento ni en la realidad. También ha sido excepcional la posibilidad que nos han dado». El Proforma ha recibido más de 25.000 visitantes desde que se inauguró el 30 de enero. Agustín Pérez Rubio, que ha seguido su evolución desde la cama de un hospital, aseguró ayer que se sentía muy satisfecho de celebrar el quinto aniversario del Musac con el Proforma y las nuevas exposiciones que se inauguran hoy. A propósito del cambio que ha experimentado el museo con el Proforma aseguró que el museo en el que ha trabajado durante estos cinco años ya no es el mismo. «El Proforma va a ser un referente, porque ha sido un proyecto en el que se ha puesto mucha energía».