Blanche y Samantha
El invento del maligno rosa belmonte
La muerte de Rue McClanahan ha coincidido con el estreno de Sexo en Nueva York 2 , que es más mala que el baladre. Peor que la primera, lo que no deja de ser meritorio. Pero aún así resulta divertida. Y hay un momento, al menos un momento, en que Sarah Jessica Parker va vestida de Zara. Las chicas de oro y Sexo en Nueva York tienen en común lo de ser series de mujeres, unas mayores, retiradas juntas en Miami, y otras más jóvenes y zascandileando por Nueva York. Es verdad que vista la última película perpetrada, lo de jóvenes es un eufemismo. De hecho, Kim Catrall tenía más años al rodar el filme (incluso el primero) que Rue McClanahan al principio de Las chicas de oro, donde ya se suponía que era una señora de edad provecta. Rue empezó con 51 y Kim tiene 54. La película, vapuleada por la crítica, ha venido a dar la razón a todos los que ponían a parir la serie. Ha magnificado todo lo feo que se escribió de ella. La película va sobre ropa y hombres. Una excusa para vestir bien hasta a Cynthia Nixon.
Demonios, eso no era la serie. Era mucho más. Las bromas sexuales de ahora no tienen gracia y Samantha hasta resulta ridícula. Y, fíjate, eso es algo que nunca pasó con Blanche Deveraux, la encantadora dama sureña devoradora de hombres a la que interpretaba Rue McClanahan en Las chicas de oro . Es verdad que pasado un tiempo todo mejora y -˜Las chicas de oro-™ tiene mejor consideración que en su época. Y no es sólo por el momento del obituario de McClanahan o por el superestrellato renovado de Betty White. Es que los guiones de Las chicas de oro eran magníficos. Sexo en Nueva York era divertida y tenía sus golpes, que diría mi abuela (Samantha: «¿Bares en los que no se puede fumar? ¿Qué será lo siguiente? ¿Bares en los que no se pueda f ?») pero blandita. Las chicas de oro era mucho más ácida. Quizá tenga que ver en ello la presencia como guionista de Marc Cherry, creador de Mujeres desesperadas . Kim Catrall, encima, sale fotografiada en la película como si fuera su madre. La siguiente que hagan que sea Las chicas de oro. The Movie