Diario de León

El invento del maligno

Noticia bomba

Publicado por
José Javier Esparza
León

Creado:

Actualizado:

Noticia bomba (pero bomba fétida): el acreditado polemista suburbano Kiko Hernández, famoso por sus sonadas intervenciones en Sálvame , ha intentado presentarse al festival de Eurovisión. El señor Kiko, sin duda movido por el neto carácter cultural de Sálvame , ha considerado que nada más lógico que proyectar su talento a escala continental, y de ahí el aventurado ensayo. Es una pena que TVE, esa gente tan reaccionaria, insensible al verdadero arte, haya frustrado la operación. Ocurre que RTVE había prohibido taxativamente a los aspirantes hacer publicidad de sí mismos, pero el señor Kiko, inmoderado, se publicitó en Sálvame (que para eso está), así que operación frustrada. ¿Hablamos ahora un poco en serio? El gran reto de Eurovisión -y eso lo sabe todo el mundo- es mantener el pingüe negocio del festolín sin perder la credibilidad artística. En los últimos años hemos visto de todo: bonitas canciones que ganaban con toda justicia y estúpidos showmen que acudían allí buscando simplemente notoriedad. Los candidatos de TVE han oscilado entre una cosa y la otra. El año pasado al fin se consiguió que TVE compitiera con cierta dignidad y esta próxima convocatoria, por lo que se va viendo, aspira a lo mismo. Piense uno lo que piense sobre el festival de Eurovisión, si uno decide ir, es bueno que guarde cierto pundonor. Pero entonces ha de contarse de antemano con la aparición de maniobras estrafalarias para vampirizar el espectáculo, y ahí es donde entran los inmarcesibles muchachos de Sálvame , el desolladero de Telecinco, siempre dispuestos a soltar estiércol donde haga falta. El año pasado fue lo de Karmele Marchante, tan ridículo que daba lástima, y este año han intentado repetir «éxito» con el ciudadano Kiko Hernández. Hay que ir acostumbrándose a que la tele, hoy por hoy, es un puro circo donde tan pronto aparece una joya como surge una boñiga, y todo forma parte del espectáculo general. Lo importante es no perder el instinto para diferenciar una cosa de otra.

tracking