Diario de León

Vega Seoane expone en Ármaga sus emociones a través del color

Eduardo Vega Seoane posa ante una de las obras que puede verse en la galería Ármaga.

Eduardo Vega Seoane posa ante una de las obras que puede verse en la galería Ármaga.

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marcelino cuevas | león
León

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Eduardo Vega Seoane (Madrid, 1955), descubrió siendo niño su vocación por la pintura. Actualmente trabaja cada día en su taller, situado en el centro de Madrid, y expone periódicamente en salas de todo el país. Él mismo decía aún no hace mucho tiempo: «Mi obra es heredera del expresionismo abstracto americano, aunque en ella se observa un lenguaje propio que intento llenar de tensión y colorido». Hoy en día el pintor, que expone sus últimos trabajos en la galería de arte leonesa Ármaga, lo tiene menos claro: «Creo que mis cuadros no tienen un fácil encasillamiento. En este momento no creo que puedan definirse como abstractos, porque contienen muchos elementos que nacen de una visión subjetiva de la realidad»

La pintura de Vega Seoane tiene firmes fundamentos, se basa en su interpretación de lo que le rodea a través de un pinceladas sueltas y naturales en la que el gesto pictórico retrata perfectamente los sentimientos del artista. Para llegar a unos lienzos desprovistos de barroquismos, compuestos de exquisita sencillez, Vega Seoane ha tenido que dejar atrás muchas etapas, ha tenido que ir purificando poco a poco los colores, ha tenido que olvidarse primero de la figuración y después, como decíamos, de la abstracción, para conseguir esa estudiada y complicada espontaneidad que queda bien patente en sus pinturas.

Sobre su trabajo ha escrito Anna Zanco: «Pincelas y manchas de color a veces sutiles, otras se acompañan de misteriosas señales llenas de simbología que se manifiestan como el espejo de aquella coherencia caótica en el cual se cumple el destino humano. En el fondo de este eterno desorden se encuentra la armonía superior y oculta. No es la razón la que ha accedido a este misterio fuera de la lógica comprensible. Aquel infinito es el que nadie puede coger en su esencia, tan solo sentir y entrar en un gesto de amor».

Para Vega Seoane, «la pintura es un juego de seducción en el que se conjugan las circunstancias del entorno, los sentimientos del pintor y los elementos técnicos y materiales de la obra artística». Digamos finalmente que sus preferencias pictóricas están repartidas entre maestros como De Kooning y Gorky. Como para Dubuffet y Van Velde el espacio es para él «una forma global» que le permite «aprender del pensamiento estético.

Lugar: Alfonso V, 6.

Horario: De 12.00 a 14.00 y de 17.00 a 21.00. Sábados, de 12.00 a 14.00.

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