«Quiero que la gente baile sin pensar demasiado en la letra»

Bailando por ahí , Chica latina o Ella no sigue modas son temas muy pinchados —y muy solicitados— los fines de semana en las pistas de baile de todo el país: detrás de éxitos como esos está Juan Magán, músico y productor barcelonés que el próximo 4 de febrero ofrecerá un gran espectáculo en la discoteca Oh! León demostrando cómo se comporta, en vivo, un dj que ahora surfea la cresta de la ola. Las entradas (23 euros) pueden adquirirse en www.ticketcyl.com y centros asociados (oficina comercial del Diario de León y Maci 3). El día del concierto valen 26 y también hay entradas VIP al precio de 90 euros.

—Estás viviendo un buen momento ahora mismo, pero ¿de dónde procede Juan Magán? ¿Qué podemos decir de tu trabajo y trayectoria para la gente que te acaba de conocer gracias a tus últimos éxitos?

—Procedo de una familia obrera que muy honradamente me enseñó a tratar a las personas de tú a tú, quizás eso me ha llevado a hacer música directa a la calle, a lo mejor con poco fundamento poético pero que explica cosas que nos pasan a todos a diario. Antes de que el público masivo me conociera producía canciones de carácter electrónico para mí y para otros artistas que las firmaban. Hice música de todos los estilos, desde house a reggaeton pasando por hip hop o incluso flamenco-chill.

—¿Cómo funciona tu proceso creativo? ¿Cómo ‘nacen’ esos temas ahora tan bailados?

—Desde la primera fase de creación estoy solo ante mis intrumentos de trabajo. Yo escribo las canciones, las compongo y produzco, todo ello grabado en mi estudio de Barcelona. Ahora cuento con la inestimable ayuda de algunos productores de mi equipo, que desarrollan ideas para que yo finalmente les dé mi visión propia. Víctor Magán, Salgado o Torrico son algunos de los artistas que contribuyen en este aspecto.

—¿Resulta difícil hacer música de baile? Hay quienes minusvaloran este tipo de música comparándola, por ejemplo, con la canción de autor. Personalmente, ¿qué quieres conseguir con tu música?

—Pretendo que la gente baile y cante las canciones sin tener que pensar demasiado en lo que mis letras significan. Llegan rápido a la gente porque son simples y con el claro objetivo de ser aprendidas con facilidad para poder disfrutar más bailando. No soy un gran educador, pero sí un comunicador con claridad. Quien da menor valor a nuestra música de baile es porque la suya no está viviendo un gran momento. La música tiene como fin distraer a las personas que la escuchan, solo eso. No soy una persona envidiosa y nunca entenderé a los que sí lo son.

—¿Qué se siente al saber que tanta gente, en tantos lugares, baila tus canciones?

—Me siento afortunado por el mero hecho de poder dedicarme a lo que más me gusta, y si a eso le sumas que gente de todo mundo te apoya, entonces se produce un estado de felicidad indescriptible. Gracias a los fans, djs y estaciones de radio, hoy puedo vivir como siempre había soñado.

—¿Qué ofrecerás al público leonés el próximo sábado?

—Energía comprimida en dos horas. Todos mis éxitos antiguos, los actuales y primicias que sólo yo presento en mis actuaciones. Trato de intrerpretar desde el escenario/cabina de dj todas mis canciones cuando suenan para acercarme más a mi público y darles algo que ningún dj del mundo hace. Los siento cerca y me ayuda a componer más canciones.

—¿Cuáles son tus próximos proyectos? ¿Algún disco en el horizonte?

—A finales de febrero verá la luz un nuevo álbum a través de Sony Music, mi compañía discográfica. Está repleto de colaboraciones con artistas urbanos de la talla de Don Omar, Pitbull, El Cata, Taboo (de Black Eyed Peas), Sohanny, Fuego y un largo etcétera. Serán doce cortes de pura música de baile.

—¿Es Internet, con todo el acceso que supone a la música, una potencialidad, o un lastre por el tema de la piratería?

1397058884Internet existe y hay que darle un uso debido. Es evidentemente una puerta y un escaparate al mundo. Que exista gente mala que hace mal uso de ese intrumento que es la Red no depende de mí, pero sí de la ley. Ellos se ocuparán de dictaminar lo que está mal o bien hecho. Por mi parte, constituye una gran ventaja poder comunicarme con mis seguidores a través de redes sociales como Twitter o Facebook y también es muy útil poder comprar en iTunes con prácticamente un solo click. En definitiva, Internet me parece genial.