La Catedral quiere entrar por los oídos con audioguías ultramodernas
Desde mañana se cobra entrada y al claustro y museo se accederá por la Torre Norte.
Imagen del coro y el trascoro de la Catedral desde una de las plataformas articuladas en el templo para la restauración.
Se acabó el gratis total. A partir de mañana, todo el que quiera admirar la luz de la Catedral tendrá que pasar por caja. El Cabildo ha dispuesto tres tipos diferentes de entrada: la individual, con un precio de cinco euros, la reducida, 4 euros, para grupos de más de cuatro personas, jubilados y estudiantes, y la escolar, que con un precio de dos euros, está destinada a grupos de estudiantes de más de doce años. Pero, además, y pensando en los ciudadanos leoneses, también se ha abierto la posibilidad de adquirir un carnet especial gracias al cual se podrá visitar el templo cuantas veces se desee a lo largo del año. Alrededor de 200 leoneses ya han optado por esta posibilidad.
El acceso a la Catedral se realizará a través de la puerta de San Francisco, mientras que la de San Juan se destinará a los fieles que acudan a los servicios religiosos. Asimismo, se modificará la entrada al claustro y al museo. Si hasta ahora se realizaba a través de la portada de la Virgen del Dado, ahora este acceso permanecerá cerrado y se articularán para este fin las puertas de la Gomia. Para ello, la taquilla que hasta ahora se encontraba en la estancia de la fachada norte que da acceso al claustro se trasladará al nuevo acceso y ésta sufrirá una limpieza y remodelación, si bien aún no hay plazos ni proyecto para este fin.
El fabriquero de la Catedral, Mario González, ha destacado que se han adquirido ya 200 audioguías con pantalla que marcarán el tiempo, la batería e indicarán al visitante el lugar de la catedral en el que se encuentra. Asimismo, el Cabildo dispondrá de cuatro radioguías para grupos de cincuenta personas.
Visitantes. Este servicio estará incluido en el precio de la entrada, que implicará la visita en el templo, el museo y el claustro. Mario González considera que esta medida conseguirá una recaudación de 800.000 euros al año, dinero con el que se rehabilitará el templo gótico. «Nuestro objetivo es reinvertir en la Catedral lo que recaudemos», destaca el fabriquero, que añade que la Pulchra era la única catedral de la comunidad con entrada libre. En este sentido, recuerda que con la crisis las administraciones han reducido de manera sobresaliente sus subvenciones a la restauración de la Catedral (en el caso de las ayudas a las vidrieras, a casi la mitad), lo que ha llevado al Cabildo a tomar una decisión de la que siempre se renegó. Y es que hasta ahora, el Cabildo había sido muy reticente a esta posibilidad al considerar que la Catedral pertenecía al conjunto de los leoneses. «Buscamos también que los visitantes contribuyan con esas tareas de restauración y que valoren más la Catedral, porque parece que lo que no se cobra no se valora, y también porque así se conocerá mejor, al aprovechar más la visita».
Mario González destaca que un informe del Observatorio Turístico de la Universidad de León asegura que, de los 400.000 visitantes que recibe cada año la capital, el 43,8% viene atraída por la Catedral. Casi 200.000 personas al año.