Diario de León

Publican por fin la monumental obra de Puerto ‘Leyendas de León’

El Ilcyl edita en junio las dos mil historias recuperadas en 300 pueblos de la provincia.

Imagen de una ilustración del renubero, una de las leyendas de la provincia de León.

Imagen de una ilustración del renubero, una de las leyendas de la provincia de León.

Publicado por
cristina fanjul | león
León

Creado:

Actualizado:

Tras más de seis años de espera (y diez de investigación), el profesor y antropólogo José Luis Puerto verá al fin publicada su monumental Leyendas de tradición oral en la provincia de León . Fue en el 2005 cuando el ILC decidió que el trabajo fuera incluido en una de las colecciones del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua. Según ha afirmado su director, Gonzalo Santonja, la obra ya está en talleres y será editada el mes que viene. El libro, publicado en un sólo tomo, consta de más de mil páginas y recoge 1.754 leyendas procedentes de 300 pueblos de la provincia, pueblos que José Luis Puerto ha «peinado» para recuperar los relatos en los que se cifra «el imaginario de nuestra especie desde que está en la tierra».

Puerto ha dividido la obra en diez campos: El cielo, la tierra, el agua, la naturaleza, los santos, los héroes, las etnias (moros, franceses, carlistas), el miedo, el humor, los animales y los seres imaginados. Cada uno de ellos se estructura además en varios subcampos.

El escritor asegura que, a pesar de lo que pudiera pensarse, no hay zonas privilegiadas en leyendas y áreas más pobres; «no es necesariamente cierto que las comarcas más aisladas tradicionalmente, como el Bierzo, los Ancares o La Cabrera, tengan más riqueza legendaria que el resto», subraya. De hecho, el antropólogo precisa que una de las leyendas más importantes de cuantas rescató apareció en un pueblo muy cercano a León. Se refiere al porqué de los límites entre un pueblo y otro. «Un día pasó un gigante con un saco de piedras; cuando se cansaba del fardo, sacaba un morrillo y con él fijaba las lindes».

En la provincia de León hay leyendas que reflejan la influencia de cada una de las fronteras históricas y culturales de las que se ha alimentado el antiguo Reino: el mundo oriental, la herencia grecolatina, la cristiana medieval y la semítica, aunque no se puede hablar de épocas, ya que unas y otras se confunden. A veces, las leyendas no son más que creencias; es lo que se denomina con el nombre de leyenda embrionaria, creencias ancestrales y fantásticas que surgen del principio de los tiempos y que desvelan la concepción animista que nuestros ancestros tenían del universo. Como muestra, la idea de que el arco iris baja a beber a los ríos, o el convencimiento de los antiguos de que el trueno es el resultado del juego de bolos a que se dedican los ángeles en el cielo.

La importancia que tiene la obra es sobresaliente. Hasta el punto de que si se intentara hacer en la actualidad, habría historias que se habrían perdido para siempre. José Luis Puerto destaca que en muchos casos, quienes mantenían viva la leyenda han muerto. «En cierta ocasión regresé a Compludo para revisar algunas de las leyendas que un cartero retirado me había relatado, pero al llegar, ya no pudo ser porque el hombre padecía alzheimer», recuerda.

Después de llevar a cabo el trabajo, Puerto está en condiciones de afirmar que las comarcas leonesas atesoran «un imaginario tradicional no habitual». «Esta tierra posee un sustrato legendario riquísimo y variadísimo», incide el experto; y así, al comparar estas leyendas leonesas con las de otra provincia que conoce bien, Salamanca (nació en La Alberca en 1953 pero lleva décadas viviendo en León) comenta que allí, aún disponiendo también de un folclore muy rico, «están más perdidas». En todo caso se trata de un patrimonio con referencias comunes en todo el noroeste peninsular.

Entre las leyendas más curiosas, el investigador y docente habla de aquellas que hablan de las xanas, si bien en las historias de la provincia casi nunca se refieren a éstas con este nombre sino con el de la mora encantada. Pero también hay antiguas referencias al basilisco en Valdería, llamado malvarisco en la zona de Payuelos; o la vieja del pan o la vieja del monte (los pastores les decían a los niños que esos personajes eran quienes les habían dado las sobras de la merienda que traían a casa), que es una versión «de la vieja buena», contrapartida de la «vieja mala» o bruja. Pero también está la madreñina del niño Jesús, la culada del diablo, el pellejo de oro...

tracking