El invento del maligno
De capa caída
Regresa un presentador de «altos vuelos» —así se presentó él— a una tele de capa caída. Ramón García vuelve con la reválida para los que suspendieron geografía e historia. ¿Conoces España? no tiene nada que ver con El Gran Prix . Aquello era una exhibición de poderío, esto es un concursito modesto. El programa viene a intentar calmar los ánimos de los descontentos con esta tele pública de saldos en que se ha convertido La 1, después del recorte aplicado por el Gobierno. Para que no digamos que solo quitan programas. También estrenan otros, aunque no sea comparable. Con lo que cuesta un episodio de Águila Roja , Ramontxu hace doscientos concursos. Claro que para reunir a tanta parroquia como el justiciero necesita ocho programas seguidos. ‘
¿Conoces España? ni ha mejorado en audiencia la franja de tarde de La 1, ni aporta demasiado a una parrilla que empieza a dar síntomas de cierto cansancio por los concursos. El programa de Ramón adolece de simpleza. En su mecánica y en el nivel de las preguntas, que están más que bien pagadas, porque 4.000 euros por saber que las islas Pitiusas están en el Mediterráneo, que Penélope Cruz es de Alcobendas y que Ibañez fue el padre de Mortadelo y Filemón... El estreno lo vieron 835.000 personas, pero a los dos días ya habían abandonado 200.000. Con más pena que gloria está pasando también Uno para ganar, el concurso de habilidades de Cuatro. Y eso que Jesús Vázquez, como Ramón, es de los presentadores del ‘tipo entusiasta’ y siempre ayuda. Y entusiasmo es probablemente lo que le falta a Nuria Roca —eso y mover la ceja como hacía Carlos Sobera— en esta revisión de un concurso mítico que reconcilió a los espectadores con el género. Ramón nos pregunta si conocemos España. Pero la pregunta es, ¿conocen los programadores de las televisiones a los espectadores?