«Me ha costado mucho trabajo llegar a Madrid y espero triunfar»

Javier Castaño hace hoy el paseíllo en Madrid, en la primera de las dos tardes que está anunciado en la plaza más importante del planeta taurino, más en una temporada en la que nadie parece distanciarse en el escalafón, salvo contadas excepciones. Lo hace, además, en el mejor momento de su carrera como matador de toros. Nadie le ha regalado nada. Al contrario, su lucha en silencio ha visto compensado, por fin, tanto sacrificio. El sábado en Nimes (Francia) demostró sus ansias de triunfar. Hoy, Las Ventas le esperan con toros de Carriquiri y Frascuelo e Ignacio Garibay en el cartel. El día 1 volverá a hacer el paseíllo, con Rafaelillo y Alberto Aguilar ante un encierro de Cuadri.

En los toros no hay apuestas, pero los aficionado esperan que hoy o el viernes, el diestro leonés triunfe y salga por la puerta grande.

- ¿Es su mejor momento como matador de toros?

- La verdad es que me encuentro muy bien. Muy motivado. Pero no hay que confiarse nunca y menos en este mundo de los toros. Ojalá embistan. Yo estoy muy tranquilo y con muchas ganas de hacer el paseíllo.

- ¿San Isidro es, este año, la cita más importante de su carrera como matador de toros después de tantos años ya de alternativa?

- Madrid es siempre importante. En todos los sentidos. Todos los toreros buscamos triunfar en Las Ventas. En mi caso, me ha costado mucho trabajo llegar hasta este momento. Creo que ha sido a base de tesón y esfuerzo. Espero que, en alguna de las dos tardes que estoy anunciado, el triunfo me favorezca. Pero tampoco las cosas acaban aquí. La vida del matador de toros es larga. Muy larga.

- Pero no me niegue que, si hoy o el viernes sale por la puerta grande, le puede cambiar la vida como torero.

- No quiero centrar todo en Madrid, sino en el día a día. Es lo que me preocupa. Estar bien cada tarde como torero. Dejar un buen sabor de boca allí donde esté anunciado.

- Pero no me negará que este año llega a Madrid en el mejor momento y después de un éxito tan importante como Nimes, con seis Miuras.

- Es verdad. No lo niego. Me apetece estar en San Isidro este año y creo, además que llego en un gran momento. Ojalá tenga suerte.

- ¿ Le gustan los carteles en los que está anunciado?

- Sí. Me gustan los dos carteles. Cuadri es una ganadería que siempre me ha dado mucha suerte. Son toros duros, pero encastados. Y Carriquiri he matado menos, pero también tengo buenas sensaciones.

- ¿Qué fue lo que más le costó en Nimes el sábado ante un encierro tan duro como Miura?

- La mentalización. Saber que tienes que estar atento a cada momento de la lidia. Estar concentrado. Lo hice y creo que las cosas me fueron bien. Estoy muy satisfecho.

- ¿En qué ha cambiado aquel Castaño que después de una buena etapa como novillero se diluyó en el escalafón pese a sus grandes cualidades?

- Creo que he ganado en madurez. También se aprende de los errores, y yo he aprendido mucho estos años en los que las cosas no siempre han sido fáciles. Te curten los años y las corridas duras, que he matado unas cuantas. Sobre todo, sabes sacar una lectura positiva de las cosas. Eso me está sirviendo mucho en este momento, más que nunca me siento torero.

- Al final de la temporada, ¿qué balance le gustaría hacer en cuanto a corridas? ¿Con cuántas se quedaría?

- Las temporadas son muy largas. Eso es lo primero que hay que decir. Puede ocurrir de todo, y hay que estar preparado. En mi opinión, lo más importante es lo que ya se ha ido haciendo. Castellón, Valencia. Sevilla... Y ahora espero que Madrid también me compense tantos esfuerzos. Para un torero como yo, meter la cabeza no es fácil. Hay que sacar un resultado positivo en todas las oportunidades que tengas. Dejar un buen sabor de boca entre los aficionados.

- Déjeme volver a mi comentario de antes. Aunque no quiera ser triunfalista, ¿no me negará que usted es el primer consciente de que ha llegado su gran oportunidad?

- La verdad es que estoy con muchas ganas. Y que de todo pienso sacar una lectura positiva.

- Los Castaño son ya una saga. ¿Cómo ve a su hermano?

- Este año tomará la alternativa. No tuvo suerte el lunes en Las Ventas, pero yo le veo con ganas de triunfar. Nadie le ha regalado nada. Como novillero está demostrando sus condiciones y lo que quiere. En mi opinión, es un buen torero.

- ¿Le duele quedarse fuera de León?

- Si se confirma, sí. Me duele mucho porque es una afición a la que siempre me he entregado como torero. Han disfrutado con mi toreo y de nueve tarde, siete he salido por la puerta grande. Gustavo Postigo padre nos ofreció la alternativa de Damíán en San Juan, pero los hijos no han cumplido su palabra después de su muerte cuando teníamos ya hasta una fecha reservada.

- ¿Con cuántas corridas le gustaría acabar este año?

- No lo sé. No está cerrando todavía sino que se van haciendo. Lo que sí creo es que voy a estar en todas las ferias importantes, tanto en España como en Francia.

- ¿ Las figuras están notando más la crisis que toreros como usted, que van hacia arriba?

-Yo puedo hablar de mí, pero no puedo hablar de los demás, en este caso de las figuras. Cada uno tendrá que defenderse por sí mismo. Es cierto que es un año especial, en el que la crisis está repercutiendo en todos los sentidos, y el mundo del toro no es ajeno. Por otro lado, se está produciendo una renovación en los carteles.

- Francia le quiere mucho.

- La verdad es que sí. Siempre me he sentido querido y arropado. Espero volver este año unas cuantas veces.