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Tita hace caja con Constable

Carmen Thyssen podría lograr en la subasta 40 millones.

Detalle del cuadro «La exclusa», de John Constable.

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miguel lorenci | madrid
León

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«Me hace falta dinero». Tita Cervera, la baronesa Thyssen, no oculta que la crisis castiga sus finanzas como las de cualquiera y necesita hacer caja. Para paliar su falta de liquidez ha decidido sacar a subasta una de las joyas de su colección particular. Pone a la venta La esclusa, de John Constable, uno de los hitos de la pintura británica del XVIII que adquirió junto su marido el barón Hans Heinrich Thyssen Bornemisza hace algo más de veinte años por 10,8 millones de libras.

La pintura se subastará el próximo 3 de julio en la sala Christie’s de Londres con un precio de salida entre 20 y 25 millones de libras, entre 25 y 32 millones de euros. El óleo del gran paisajista británico marcó en su día un récord que podría renovar ahora. Nadie duda que esta pintura, la mejor de una serie de seis grandes telas de Constable, superará los 30 millones de euros y quizá roce los 40. «Habrá pujas importantes, porque para Inglaterra Constable es el número uno», anticipa la baronesa.

Carmen Cervera barajaba la idea se subastar la pieza desde que hace un par de años se agravó la crisis. Contaba con un compradoque dio la espantada.Se la ofreció al ministerio de Cultura «a precio de favor y en unas condiciones muy favorables, incluso para pagarla a plazos». Pero ni la anterior titular del departamento, Ángeles González- Sinde, ni su sucesor, José Ignacio Wert, «movieron ficha», lamenta la baronesa.

Dice Carmen Cervera que mantener su colección y sus casas es «muy caro» y que necesita dinero. El lunes informo «por cortesía» al patronato del museo Thyssen de su intención de vender la pintura. Una decisión que ha contado con la oposición abierta de de Francesca de Habsburgo, hija del barón Thyssen y Norman Rosenthal,miembros del patronato, que han reiterado por escrito su desacuerdo y han presionado al ministerio de Cultura para frenar la venta. Pero nadie podía vetar ni impedir la subasta.

Lo que puede vender

El acuerdo de cesión al Estado español de la colección privada de Carmen Thyssen, por la que cede gratuitamente 400 de sus 800 obras, le autoriza a vender hasta un 10 por ciento de valor de una colección valorada en 800 millones de euros. El cuadro de Constable apenas supone un 4,5% de ese porcentaje. Podría así la baronesa vender otras piezas señeras de su colección, pero dice que no lo hará. El precio del Constable es una cifra muy elevada pero no la más alta, ni mucho menos, de las joyas de su colección. Entre todas, destaca un portentoso Gauguin, Mata Mua, valorado en 150 millones de euros y que para Tita es «como la Gioconda para el Louvre».

«Me duele mucho vender esta pintura y no habrá más ventas, pero no me queda más remedio» explicaba la baronesa este martes a un grupo de informadores. «No habría dado un paso como este si no viviéramos una situación de crisis como la que estamos atravesando» se justifica.Dice que si hubiera alcanzado un acuerdo con el Estado para renovar el alquiler de la colección «no lo habría vendido». En 2011 vencía el contrato de alquiler de la colección que renovó gratuitamente primero hasta 2012 y después hasta 2013. «A partir de aquí ya veremos. Soy optimista», ha añadido Carmen Thyssen que en o más duro de su desencuentro con GonzálezSinde amagó con llevarse los cuadros. Sus estrecheces no han impedido a la baronesa adquirir nuevas piezas. Sendas pinturas de Gonzalo Bilbao y de Cecilo Plá que viajarán a su museo de Málaga.

La austeridad de Tita

«Llevo una vida muy austera. Afronto muchos gastos de la colección; con mis propios fondos pago estudios de obras, catálogos y viajes y siempre mis pinturas han estado libres de carga» explica Carmen Thyssen al tiempo pide tranquilidad y que nadie se eche las manos a la cabeza. «Ya se habían producido antes ventas de cuadros en la familia Thyssen» explica. «Lo siento mucho y me sabe muy mal, pero la crisis también es para los coleccionistas y yo tengo 800 millones cedidos gratis al Estado», insiste. Asegura la baronesa que la venta de La esclusa le permitirá asegurar el futuro de la colección. Reconoce que negoció la subasta con Sotheby’s y Christie’s y que se decidió por esta. El cuadro está en su colección particular desde 2004.

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