Léon mete en un búnker a 50 artistas
El agitador cultural Pablo Guerra inventa un festival para ‘dar la alternativa’ a jóvenes músicos, pintores, escultores, arquitectos, fotógrafos y cineastas durante cinco días .
Espacio Vías se convertirá en un búnker a partir del lunes, en una iniciativa inventada por Pablo Guerra Nicolás y que aglutinará a jóvenes creadores de todos los ámbitos artísticos. La crisis, los recortes y la escasez imaginativa de la juventud actual llevaron al agitador cultural Pablo Guerra a pedir a Espacio Vías un lugar para montar una exposición de jóvenes artistas que se convirtiera en un llamamiento a la iniciativa y a las nuevas ideas, ya que como Óscar Calzado diría, «crisis en chino tiene un significado dual». Por un lado, se refiere a la presencia de una amenaza, pero también quiere decir ‘oportunidad’.
Pablo Guerra es un leonés de 20 años afincado en Madrid. Estudiante de Cine y de Historia del Arte ha estado muy ligado desde pequeño a las Artes Plásticas. Desde que comenzó a fraguar el proyecto Búnker, sus horas de sueño se han reducido al tiempo que aumentaba la dimensión del proyecto. Y es que lo que en principio parecía una simple exposición de jóvenes ha acabado por convertirse en una obra de arte total enmarcada en un festival.
Guerra Nicolás asegura que en el mundo del arte español, o eres rico o ‘hijo de’, y si no no llegas a nada. «Pero con poco se puede. Hemos montado todo esto con apenas 200 euros» precisa.
A los responsables de Espacio Vías les pareció una idea «genial» que poco a poco fue creciendo. De hecho ya han firmado las fechas para que esta iniciativa se repita el próximo año. Pablo Guerra sólo quería un espacio expositivo y ellos se lo cedieron gratuitamente.
Una vez conseguido el lugar tenían que darse a conocer, para lo que pusieron en marcha una campaña con flyers en su facultad de Madrid y consiguieron que los grupos de música Nixon y La Habitación Roja les apadrinaen y además actuarán en el festival -serán los únicos conciertos no gratuitos-.
Pablo Guerra asegura que gracias al ‘boca a oreja’ ha conseguido que unos 50 artistas, no sólo de León sino de toda España, se acerquen hasta la ciudad. «En su gran mayoría son jóvenes creadores, cuya condición no importa», de hecho dentro del festival no son considerados como artistas, sino gente con imaginación, jóvenes creadores al fin y al cabo. Además, asegura que a muchos ha tenido que descartarles, puesto que la idea es que el festival sea algo «rompedor», «con iniciativa», que al fin y al cabo es la palabra que se lleva la palma en este lugar.
La invención del nombre
Este grupo de jóvenes se autodenominan Búnker 145, un nombre con historia. «Hace tiempo pensé hacer con una amiga una tira de cómic con este nombre. Pero nunca se llegó a realizar», subraya Guerra Nicolás, que recuerda cómo el nombre le rondaba la cabeza. «La sonoridad de la B con la K y el sentido que le daría al proyecto era importante». El creador añade que se trata de un nombre reciclado que, además, alberga en su interior un contrasentido entre el significado de búnker y lo que quieren hacer: «Abrir el arte a todo el mundo». En cuanto a la cifra 145, «son simplemente números que me gustan».
La idea es dar superficie a gente inquieta, jóvenes con las ideas claras, arquitectos, escultores, pintores, fotógrafos, músicos o cineastas que estén empezando su andadura. Pero, Pablo Guerra asegura que cualquier creación artística tendrá cabida en Bunker Festival.
El planteamiento de esta semana es montar en Espacio Vías una cafetería, sillones y lugares para que quien vaya a disfrutarlo no vea la exposición y se vaya. «Queremos que se queden, que les envuelva el espacio, eso es lo que buscamos» dice. Para ello, no pierde de vista la atmósfera que debe envolver las artes plásticas: «A la vez, de fondo, jóvenes músicos y musicólogos tocarán melodías electrónicas, pero música de la buena, porque se trata de jóvenes que están investigando para cambiar lo establecido», recalca.
Los locales patrocinadores continuarán con fiestas nocturnas, donde también habráconcursos, batallas de dj’s o de bandas. «Queremos romper con la imagen de que la gente a la que interesa la cultura es seria o aburrida, que siempre está filosofando. No, nos gusta divertirnos y salir de fiesta como gente joven que somos» asegura.