La ‘chamana’ llevaba a todas partes un medallón indio

Durante la semana que permaneció en cuidados intensivos, Chavela Vargas estuvo consciente y pidió su medallón chamánico. Era un regalo de los indios huicholes, etnia que considera que los chamanes tienen dones espirituales para predecir el futuro y trascender a la muerte. Los huicholes nombraron chamana a Chavela, quien lució siempre en sus conciertos el medallón. «No voy a morir porque soy una chamana y nosotros no morimos, trascendemos», dijo Vargas dos días antes de expirar. Esa noche, un grupo de admiradores se acercó al hospital para ofrecerle una serenata de despedida. Chavela pidió que no prolongaran su vida mediante procedimientos clínicos que obstaculizaran su «transición». «Tenía problemas respiratorios muy severos y no le llegaba el oxígeno» precisó Cortina, autora de Las verdades de Chavela, quien estuvo al lado de la cantante hasta el final.

Expresaron su dolor por la muerte de Chavela compatriotas como Julieta Venegas o Paulina Rubio. También el uruguayo Jorge Drexler, el argentino Diego Torres, el colombiano Carlos Vives, el venezolano Carlos Baute y los españoles Alejandro Sanz, Ismael Serrano y Dani Martín, que escribieron tuits de homenaje y despedida.