Hacer de Ana
El invento del maligno Rosa Belmonte
En una entrevista en Jot Down , Rosa María Calaf vuelve al exuberante jardín de Carbonero. Vuelve a lo mismo. Otra cosa es que se la malinterprete o no se vea lo evidente. Habla de la banalización, del espectáculo, de cómo la mujer ha perdido peso periodístico con la frivolización de su imagen. Recuerda que lo que quería plantear era si recibíamos el periodismo a que teníamos derecho o nos estaban dando espectáculo más un poco de información.
El lunes pasado nos enterábamos de que María Casado iba a ser la nueva presentadora de Los desayunos , sustituyendo a Ana Pastor (igual que había hecho en 59 segundos , donde Pastor había sucedido a Mamen Mendizábal). Antes de eso, el mismo lunes habíamos visto a María Casado en la portada de Sálvame vestida solo con la parte de abajo del biquini. Con barriguita, estrías, un pecho normal. Vamos, lo que viene siendo una faena de campeonato. Si una periodista guapa se supone que es tonta, una que no va de tía buena debe de ser Edward R. Murrow.
Pero lo cierto es que no hay correspondencia alguna entre belleza/burricie y fealdad/excelencia. Ni había pensado en María Casado, pero desde el lunes me siento muy solidaria con ella. Por las fotos y por tener que sustituir a un icono, a una mártir del facherío.
El ‘anapastorismo’ ya ha salido a latigar a la rubia. El ‘anapastorismo’ es un concepto desbocado que poco tiene que ver con el periodismo, tiene que ver con el espectáculo del periodismo. Otro espectáculo del periodismo.
Pero no por culpa de Ana Pastor, que hace su trabajo como sabe (y seguirá haciéndolo), sino por lo generado alrededor de su persona, de su personaje.
Al final, eso sí, parece que no ha desembarcado en TVE un retén de Intereconomía . Le ha caído a María Casado una buena encima.
Ya la han descalificado antes de empezar (aunque sea de sobra conocida por el Telediario y por 59 segundos , se llame como se llame). Un periódico tenía este titular con la información de su nombramiento: «María Casado hará de Ana Pastor en Los desayunos ». Me gustaría saber qué piensa Calaf de este titular.