Cerrar

Nueva luz sobre el ‘Guernica’ y los años 30

El Reina Sofía pone en valor con 400 grandes piezas una década clave en la que el arte basculó «entre la propaganda y la pedagogía».

Una de las obras de la exposición ‘Encuentros con los años 30’ y visitantes contemplando el ‘Guernica’.

Publicado por
miguel lorenci | madrid
León

Creado:

Actualizado:

Para los historiadores del arte los cambios decisivos en la plástica del siglo XX se dieron en las dos primeras décadas del siglo. Pero fueron más radicales y sustanciales los que llegaron en los convulsos y conflictivos años treinta, los de los totalitarismos de todo signo y la guerra global. Esta es la tesis de Encuentros con los años 30, la ambiciosa muestra con la que el Museo Reina Sofía celebra el aniversario del Guernica y pone en valor una década crucial. Lo hace con más de 400 piezas de primera línea, obras clave para el devenir plástico del siglo XX que exhibe en 2.000 metros cuadrado en dos plantas del edificio Sabatini.

El 70% de las piezas, cedidas por grandes museos y colecciones de todo el mundo, no se había visto antes en España. Con esta muestra que inauguran hoy la reina Sofía y el ministro Wert, se celebran los 75 primeros años del Guernica, alma y pulmón del museo público, y se reordena la colección estable en la segunda planta, la que alberga la universal obra pintada por Picasso en 1937. Se revisa el discurso expositivo al calor de la tesis que defiende tanto el director de Reina, Manuel Borja-Villel, comisario de la muestra junto a Jordana Mendelson, para quienes «los grandes cambios llegaron en aquellos años treinta que afrontaron conflictos semejantes a los que vivimos hoy». Un momento «de una intensidad e importancia centrales para el arte, como demuestra el Guernica, en el que los regímenes autoritarios, lejos de rechazar las vanguardias, comprenden que la hegemonía cultural es el paso previo y necesario para la dominación política».

Años decisivos y convulsos en los que «los artistas chocan con sus fantasmas y buscan soluciones» en un rica ensalada de ‘ismos’, tendencias y movimientos «a partir de la abstracción, el surrealismo o el realismo».

Una era en la que el salto tecnológico «llega al arte de la mano del cine y la fotografía en una revolución que genera un lenguaje nuevo y original, equiparable a la que hemos vivimos con la tecnología digital» propone Borja-Villel. La muestra «hace justicia con un período crucial y poco estudiado del siglo XX, que sienta las bases de la actualidad tanto por la intensidad y la implicación de los artistas en su labor, en la sociedad y en la política y en el que le creación se movió entre la propaganda y la pedagogía, ente lo popular y lo populista» según Borja-Villel. Un tiempo en que artistas y políticos «se enfrentan y se apoyan en una relación ambigua».

Que se tiene «por un periodo menor para el arte, una etapa de eclecticismo y con un arte meramente instrumental, cuando en realidad fueron años de enorme intensidad y creatividad en el que el arte español conecta con el internacional y junto a Miró y Picasso emergen Bores, Gargallo o Maruja Mallo». La exposición es así un esclarecedor paseo por el arte del siglo XX y sus contradicciones.