Carlos Alsina. periodista, director de ‘la brújula’
«Hay pocos asuntos en los que no quepa un toque de humor»
León es la ciudad a la que más veces se ha desplazado el equipo de ‘La brújula’ de Onda Cero: todos los años desde el 2006. Hoy, León Plaza acoge la emisión de un espacio comandado por la sólida voz de Alsina.
El centro comercial León Plaza acoge hoy a partir de las 20.00 horas la emisión del informativo de Onda Cero La brújula , uno de los más seguidos de la radio española. Carlos Alsina y todo su equipo se desplazan a León para que cualquier persona que lo desee pueda seguir el desarrollo en directo de un programa que en esta ocasión dedicará una atención especial a los asuntos de la provincia. Junto a su director y presentador estarán los comentaristas habituales de La brújula de la economía Ignacio Rodríguez Burgos, Juan Carlos Lozano y Marta García Aller, así como Pepe Oneto, Javier Caraballo y Chema Crespo.
—¿Cuál el secreto para crear ese tan atractivo ambiente de camaradería que se respira en el programa, especialmente en ‘La brújula de la economía’?
—Pienso que no se crea, que viene de serie, instalado en el propio programa. Se trata de algo natural que no se puede fingir ni forzar porque, si fuera así, se notaría y no funcionaría. En la radio, el oyente percibe muy bien qué hay al otro lado, y uno, en un programa, aparece tal y como es. Pero es que yo no sé trabajar de otra manera que no sea en la divulgación, en la interpretación de la actualidad y en la asunción de que la vida está llena, por fortuna, de puntos de vista diferentes, y lo positivo es el contraste de éstos.
—Después de tantas noches escuchando a Rodríguez Braun o a Iturriaga, ¿ha conseguido aprender algo sobre economía o más bien ha ‘desaprendido’?
—(risas) Pues mira, creo que sí he aprendido algo... aunque también habría que ser muy bruto para estar al lado de gente que sabe tanto y que no se te acabe pegando algo. Lo que he aprendido es que la economía no es una ciencia ni tan exacta ni tan difícil como solemos creer los legos en la materia.
—Pues muchas veces resulta endiabladamente compleja...
—Es que nosotros la asimilamos a las matemáticas, a una ciencia en la que, planteado un problema, se le aplica un remedio o un método concreto y se soluciona, y punto final. Aquí no. No existe una única solución, hay 18 posibles y a lo mejor unas y otras son completamente opuestas, incompatibles. Pertenecen a escuelas ideológicamente diferentes, cada una de las cuales ofrece propuestas o recetas irreconciliables.
—Claro, ¿cómo saber cuál es el tratamiento correcto?
—Eso es. Ahora mismo en Europa tenemos dos tipos de fórmulas, ¿cómo saber cuál es la buena? Por un lado están las políticas de austeridad de Angela Merkel y demás, que abogan por ahorrar y rebajar el déficit; y por otro, las que dicen que hay que ‘desequilibrar’ un poco las cuentas para no acabar cayendo del todo. La primera, que es la que se ha aplicado aquí, ¿ha dado resultado? Tres años después, en Grecia, Portugal, España... la cosa no sólo no está mejor sino que ha empeorado. Quienes las defienden dicen que requieren más tiempo... ¿Nadie sabe qué hacer? Pues no. Es un debate.
—Una de vuestras máximas es hacer la información comprensible para todos.
—Sí, nuestro criterio es intentar que cualquier persona pueda comprender estos temas. Pero también hay puristas, gente muy especializada, que a veces nos acusan de ‘frivolizar’ la información. Bueno, eso nos pasa a todos los periodistas. Es un equilibrio difícil. A los economistas, en concreto, a veces parece que les gustan emplear términos oscuros como ese ya tan famoso del apalancamiento .
—Otro elemento vital del espacio es el humor...
—Pocos asuntos hay en los que no quepa una pincelada de humor. Es algo que está en la vida, en la propia condición humana. Por ejemplo, no hay momento menos propicio para él, al menos de entrada, que un entierro y sin embargo cuando estás en uno ves que aquí y allá aparece... lo necesitamos.co de dramatizar, me gusta desesolemnizar. Además, creo que quien emplea el recurso del humor es porque conoce, domina ese tema.