Atracción por lo feo
Opinión | rosa belmonte
La voz’ sigue siendo un programa blanco aunque el affaire de Sharay Abellán haya introducido la sombra amarillista. La voz no necesita mechas externas para ser el gran éxito televisivo de la temporada (de muchas temporadas). Pero a veces no se puede evitar que las cosas se vayan de las manos. Una frase suprimida en la edición de un espacio grabado y la interpretación de la misma por un testigo han dado lugar a un lío tonto y banal alimentado por sus protagonistas, probablemente para defenderse de acusaciones falsas.
A veces la gente malinterpreta una frase escrita, ¡cómo no se va a malinterpretar algo que se ha oído! Y parece que no hubo amenaza («Tú no sabes quién es mi padre»).
La aspirante a cantante, quizá de manera torpe, solo tiró de su progenitor dirigiéndose a Bisbal («Conoces a mi padre, ¿no?»). El pirómano Kiko Hernández puso la mecha en Sálvame diciendo que Sharay había amenazado a Bisbal.
Pero es que, aunque la primera frase hubiera sido cierta, ¿qué meliflua amenaza propia de los Teleñecos es esa? Lo cierto es que de la bola soltada por Kiko se montó una montaña, pese a que Telecinco frenó que se hablara del asunto en sus programas, aunque luego diera voz a la chica en uno nuevo.
Es una polémica insignificante, vale, pero Telecinco está llena de polémicas insignificantes. Y en el fondo hay que entender la atracción del telespectador (o del lector) por lo sucio, sobre todo con un programa tan blanco, tan Sonrisas y lágrimas . Uno de los mayores ganchos de Pesadilla en la cocina es esa parte How clean is your house? en la que disfrutamos a distancia de la mugre de los demás. En el programa del jueves, el cocinero Chicote descubre un ratón momificado en el lavavajillas del restaurante. Y la sección de Aída Nízar en Sálvame también engancha más cuando ella se mete en alguna casa repugnante y empieza con las arcadas.
Lo bueno es que a partir del miércoles llegan las galas en directo de La voz y será más difícil esconder lo feo. Aunque la fealdad sea una de las reivindicaciones del programa.