Un periodista colombiano se alza con el premio de cuentos Unamuno
Marco Fidel Sánchez se adjudica el galardón con el relato ‘Gracia, la de la criatura’.
Imagen del momento en el que el jurado anuncia el ganador del certamen.
El periodista colombiano afincada en la Comunidad Valenciana Marco Fidel Sánchez ganó ayer con Gracia, la de la criatura el 48 Premio Internacional de Cuentos Miguel de Unamuno, al que han concurrido unos 1.500 trabajos y dotado con 4.000 euros.
Así lo dio a conocer el presidente del jurado, el profesor de la Universidad de Salamanca Javier San José, quien enmarcó el trabajo de Marco Fidel Sánchez en «el género erótico». Gracia, la de la criatura narra, en palabras de San José, «la historia de un fotógrafo y una bella modelo mulata que se enfrenta a su recato moral frente a la cámara del profesional, quien consigue ir derribando las barreras de la mujer hasta lograrlo».
Además, «una trama negra une los destinos del coprotagonista y el novio de la mujer, molesto por la actitud de la joven en el estudio fotográfico», ha apostillado. De «sugerente» ha tildado el profesor la obra del periodista colombiano, de la que además ha dicho que es «riquísima, elaborada de forma muy atractiva y con un extraordinario ritmo narrativo muy preciso en la recreación de las situaciones».
Marco Fidel Sánchez ha merecido recientemente, según reveló el presidente del jurado, el Premio Ciudad de Bogotá de Novela por La rosa de fuego.
El 48 Premio Internacional de Cuentos Miguel de Unamuno, convocado por la Obra Social de Caja España-Duero, ha distinguido con sendos accésit, dotados cada uno 2.000 euros, al filólogo Santiago Casero, que reside en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), y al funcionario Miguel Ángel Gayo, que vive en Sevilla.
En el caso de Casero, el accésit ha sido por su trabajo La pistola de Chéjov , de «temática policíaca y ambición metaficcional», según el presidente del jurado. Miguel Ángel Gayo ha merecido el otro accésit por Alfil conquista reina, que comienza con una cita de Miguel de Cervantes para establecer «la analogía de una partida de ajedrez en el camino de un hombre hacia la conquista de una dama de carne y hueso».
La pistola de Chéjov relata, ha detallado San José, los avatares de «un escritor que espera unos textos para corregir pero recibe en su lugar una pistola sobre la que comienza a indagar y construye una trama de crímenes en un ambiente urbano». Junto a ella, «se teje una reflexión existencial a través de un relato deconstruido y fragmentado cuyos elementos se van juntando en un final abierto que implica al lector».
Por su parte, del trabajo de Gayo está «bien urdido, organizado, solvente e innovador en lo estructural» y «se fragmenta recreando los movimientos sobre el tablero y diseccionando la partida en la que se ha convertido el trayecto hacia el corazón de la mujer».