Aguilar de Campoo estudiará la vida cotidiana en los monasterios

La próxima edición del Seminario de Historia del Monacato, que se clausuró ayer en Aguilar de Campoo (Palencia) tras analizar el papel de los nobles en el origen y desarrollo de los monasterios, se centrará en el interior de estos templos y la vida cotidiana de sus habitantes.

Así lo adelantó ayer, durante la clausura del seminario, el catedrático José Ángel García de Cortázar, uno de los coordinadores de esta edición organizada por la Fundación Santa María la Real en Aguilar de Campoo en colaboración con la Universidad de Cantabria.

«Si bien estos últimos años últimos hemos analizado el papel de reyes, obispos y nobles con los monasterios, la próxima edición nos centraremos en el interior de los edificios, en el ‘ora et labora’, en la vida cotidiana de los monasterios», avanzó García de Cortázar.

Tras 27 ediciones, el Seminario de Historia del Monacato, en el que han participado este año 110 alumnos, es una de las actividades formativas que desarrollan la Fundación Santa María la Real y la Universidad de Cantabria, con más éxito entre aficionados y estudiosos del románico y la cultura medieval.

El presidente de la Fundación Santa María la Real, José María Pérez, Peridis , y la vicerrectora de Cultura, Participación y Difusión de la Universidad de Cantabria, Elena Martín Latorre, fueron los encargados de clausurar el programa de conferencias y coloquios en torno a las relaciones que la nobleza medieval con los cenobios.

La programación del Centro de Estudios del Románico de la Fundación continuará en otoño con la segunda convocatoria del Taller de Fotografía del Patrimonio y el Coloquio Ars Mediaevalis , que analizará el poder comunicativo y persuasivo de la imagen medieval a través de ponencias de investigadores internacionales de reconocido prestigio.

El programa teórico se completará con las visitas al monasterio de San Zoilo y a la iglesia de Santiago en Carrión de los Condes, a la iglesia de Santa María la Blanca de Villalcázar de Sirga y a San Martín de Frómista, todas en Palencia.