Contra el bullicio, paisajes pictóricos repletos de calma
La leonesa Ana Prieto presenta sus nuevas creaciones en la Fundación Vela Zanetti.
La joven artista leonesa Ana Prieto muestra estos días sus obras en la Fundación Vela Zanetti. Ana Prieto ha tocado en su corta pero intensa carrera innumerables conjuntos temáticos para llegar, finalmente, a una muy interesante representación de paisajes urbanos, con sugerentes escapadas a las playas y sus horizontes azules.
La pintora se desenvuelve con facilidad en la gama de los grises y con ellos consigue interesantes visiones de varias ciudades americanas y también de algunos rincones leoneses.
Decíamos hace tres años que la pintura de Ana Prieto era interesante y que en su exposición de entonces no había sabido hacer una selección de sus trabajos. Ahora tenemos que decir lo contrario, todos y cada uno de los cuadros que la artista ha colgado de las antañonas paredes de la institución cultural tienen la impronta de la calidad, de la pintura bien hecha. Hay que destacar, como ella misma hace en el título de la muestra, la sensación de paz que producen. Los grises que emplea con gran sabiduría para reflejar las calles abrillantadas por la lluvia y los rascacielos cubiertos por la niebla tienen el tono justo para que olvidemos los ruidosos automóviles que las pueblan, las bulliciosas y las apresuradas masas de gente que las transitan. Viendo sus cuadros, el espectador siente una sensación semejante a la percibida ante esas imágenes cinematográficas a cámara lenta que se suceden en silencio y que indican que un solo instante se puede extender en el tiempo indefinidamente. Prieto ha trabajado duramente y ha conseguido un trabajo muy digno. En su pintura sigue manifestándose el justo empleo de las masas de color, el buen dibujo y, sobre todo, la intención, el saber lo que se quiere expresar a través de sus pinceladas sobre el lienzo.
En este caso la búsqueda ha sido en un mundo inventado, un universo que se escapa de la monotonía de lo cotidiano para acercar al espectador unas calles y unas playas llenas de paz, de calma y también de belleza.