Diario de León
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Opinión | yolanda veiga

Existe un consenso absoluto: José Sacristán es un actorazo y está enorme dentro del papel pequeño que le han dado en Velvet. Es lo que se dice un secundario de lujo, nombres que visten mucho en los títulos de crédito pero que en la trama son personajes periféricos. Hasta ahora el papel de Sacristán era el de mero guardián del futuro de las galerías y de su sobrina Ana (Paula Echevarría), a quien quiere sin demostrárselo. Aparecía siempre por una esquina del plano, el semblante serio, soltaba un par de frases y se retiraba por el mismo rincón. Pero en el último episodio hemos visto que está al tanto del chantaje que sufre Alberto (Miguel Ángel Silvestre) y que es el conocedor de los secretos familiares, lo que deja a los guionistas un campo abierto para hacer crecer a su personaje. A la espera del desarrollo que le den, a buen seguro que José Sacristán no será el protagonista. Los que cortan en bacalao en Velvet y en todas las series españolas son los jóvenes. Pero un determinado tipo de jóvenes: veinteañeros, guapos y heterosexuales, que viven un amor clásico, con ellos en posición dominante y ellas dejándose querer. En Velvet , Silvestre es el hijo del jefe, un chaval al que le ha venido todo regalado y que corteja a la modista, que es más guapa que cualquiera de las chicas bien que le pretenden.

En El Príncipe , un poli duro y guapísimo (Álex González) se juega el tipo y la carrera por la muchacha de los ojos bonitos (Hiba Abouk). Y en Los Nuestros que prepara Telecinco, un comandante del ejército (Hugo Silva) se saltará la disciplina militar y lo que haga falta por su ‘soldadito’, encarnado por la también guapísima Blanca Suárez. En ese juego de conquistas, que lo mismo sujeta la trama en unas galerías de moda de los años 50 que en un barrio de Ceuta, solo sirve la gente guapa. Hubo un tiempo en que triunfaron las series familiares donde salían muchos niños ( Médico de familia, Los Serrano ), luego las de profesiones ( Periodistas, Hospital Central )... y ahora mandan los guapos y las guapas. Menos mal que los guionistas de Cuéntame no han obligado a Antonio a ponerle los cuernos a Merche con Hiba Abouk o con Blanca Suárez..

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