CULTURA
El Musac se enfrenta al Imperio
Reflexiona sobre la huella colonial por medio de 350 obras repartidas entre su sede, Pallarés y San Marcos .
«No buscamos el relato único, el oficial, sino los múltiples, los más variados relatos del colonialismo». Juan Guardiola, comisario de la gran exposición que hoy a las 17.00 horas se abre en el Musac —y en otras dos sedes: el Museo de León y San Marcos—, se refería así al heterogéneo rostro de Colonia apócrifa. Imágenes de la colonialidad en España , un montaje que reflexiona, y por primera vez con estas dimensiones, en torno a un concepto básico para entender nuestra historia y la de gran parte del mundo, y eso pese a su carácter siempre objeto de controversia: el colonialismo o imperialismo. Un aspecto que no es sólo pasado sino presente, pues sus huellas y efectos se siguen viviendo y percibiendo, hoy, de múltiples maneras.
Esta exposición colectiva que extiende su mirada sobre cinco siglos engloba 350 obras de más de 120 artistas tanto históricos como contemporáneos; entre los primeros se cuentan nombres como Juan de la Cosa (siglo XV), Francisco de Goya (siglo XVIII), Mariano Fortuny (XIX), Maruja Mallo o José Vela Zanetti (XX). Entre los segundos hay obras de creadores de tanto prestigio como Pilar Albarracín, Luis Camnitzer, Joan Fontcuberta, Cristina García Rodero, El Perro o Fernando Sánchez Castillo, por poner unos pocos ejemplos.
Durante la presentación, ayer, de esta exhibición, el director general de Políticas Culturales de la Junta, José Ramón Alonso, quiso recordar que su apertura coincide aproximadamente con los doce meses transcurridos desde la llegada al museo de su actual director, Manuel Olveira, un año, como dijo, «marcado por el trabajo, el compromiso, la iniciativa y una proyección tanto local y regional como nacional e internacional», y no olvidó que durante este período de tiempo tuvo lugar el primer desembarco del Musac en Asia, con una exposición en la ciudad de Tokio por la que pasaron 25.500 personas. Dentro de este apartado de contextualización, Alonso también se refirió al buen sabor de boca dejado por el último ciclo basado en la poesía ( Nombrando el porvenir ), que atrajo a 1.400 visitantes, y a los últimos datos de público registrados este año por el Museo de Arte Contemporáneo: desde enero, fueron 24.040 las personas que visitaron el Musac, 1.420 más que en el mismo periodo de tiempo del año pasado, algo que valoró muy positivamente y que denominó «cambio de tendencia».
En cuanto a Colonia apócrifa , José Ramón Alonso la calificó de «hito en la historia del museo» por su «ambición artística» y por el hecho de aunar «cantidad y calidad», y avanzó que no guarda un orden cronológico «sino temático». Alonso no dudó en señalar que resulta «imposible» comprender España sin conocer América Latina, su historia, cultura, problemas y retos. «Con ellos somos más, y más ricos», sintetizó.
Durante su intervención, el director del centro, Manuel Olveira, observó que España cuenta con un «potente pasado colonial» pero que, a pesar de ello, «nunca se había llevado a cabo, sobre él, una reflexión artística de este calibre». Además, desgranó algunas características de esta muestra «ambiciosa y compleja», como que «no sólo contiene arte, y no sólo contiene arte contemporáneo», en alusión a la presencia en ella de objetos etnográficos, de efectos militares, de mapas... piezas incluidas porque «amplían ámbitos de conocimiento». Además, recalcó que en ningún caso son asuntos propios del pasado: «Sus efectos prosiguen hoy», dijo.
Por su parte, el director del Museo de León, Luis Grau, mostró su absoluta disponibilidad de seguir colaborando con el Musac y, al hilo del guion de la célebre película Casablanca , «espero que esto sea el principio de una larga amistad».
Fue Juan Guardiola, el comisario de la muestra, quien explicitó los títulos de los bloques temáticos que contempla la exposición: el Musac acoge, tras una introducción llamada Archivo , las partes de Cartografía , Historia , Conquista , Evangelio , Violencia , Antropología y Orientalismo ; mientras que en el Museo de León está representada la Ciudadanía . El anexo monumental del Museo de León en San Marcos alberga la instalación de audio Un punto de control del artista afincado en Castro de Cepeda Rafael Martínez del Pozo. Guardiola recordó la esencia del colonialismo como la «presión ejercida por un país sobre otro con objeto de explotar sus recursos naturales y humanos», hecho que acaba por crear situaciones de dominio y desigualdad. «En esta exposición estamos ante una historia sobre el arte español pero contada de otra manera», condensó el comisario.
Los autores leoneses que participan en la muestra son David Iturregui, Álvaro Laiz, Luis Melón Arroyo y Raquel Sánchez Friera junto al creador afincado en la Cepeda Rafael Martínez. Pero además, entre las integrantes del colectivo Declinación Magnética, grupo que ofrece un interesante audiovisual en la misma, está la leonesa Silvia Zayas. Y varias instituciones locales han prestado obras para la exposición, como el Museo de León, la Fundación Vela Zanetti, el Instituto Leonés de Cultura, el Museo Bíblico y Oriental y el Museo Catedralicio y Diocesano.
Durante el fin de semana, la exposición es gratuita para todos los públicos y lleva aparejada una programación paralela de visitas guiadas y conciertos como el de hoy a cargo del grupo Black Shampoo o la conferencia performativa Fractalización de fronteras más allá de las metrópolis , por Maribel Casas y Sebastián Cobarrubias, que tuvo lugar ayer.
«La muestra, sin antecedentes —ni por la temática, ni por lo ambicioso de su formato— propone un nuevo modo de reflexionar sobre la representación y la construcción de las imágenes coloniales; abordando cuestiones de historia, cultura, arte y realidad social acaecidos en nuestro país desde el siglo XV al siglo XXI», informaron desde el Musac, recordando que cada apartado incluye «tanto obras de arte como documentos clásicos y contemporáneos de artistas europeos, latinoamericanos, africanos y asiáticos». Conceptos como colonialismo interno, soberanía e inmigración, cartografía (una cartografía nada inocente u objetiva, en muchos casos) están presentes en un montaje que, asimismo, y de forma intercalada, «se incluyen obras de nueva producción encargadas a artistas y colectivos, basadas en narrativas coloniales presentes en Castilla y León», continuaron.
«El título Colonia apócrifa hace referencia tanto al conjunto de personas como al territorio físico dominado y administrado bajo un (supuesto, fingido y falso) ‘destino’ espiritual, característico del ‘estilo colonial’ hispano», contextualizaron fuentes del Musac. «El colonialismo hace uso de ciencias sociales como la historia, disciplinas científicas como la antropología, dogmas religiosos, como el evangelio, o incluso estilos artísticos, como el orientalismo, para legitimar su discurso de dominación. A partir de estos conceptos, la exposición se plantea como un espacio de pensamiento en torno a los procesos y las prácticas culturales del imaginario colonial hispano sobre el espacio simbólico del territorio», prosiguieron.