La Junta reparte 250.000 euros a la vez que ignora el Festival de Órgano

Julio, el mes en que el gobierno autonómico denegó cualquier tipo de ayuda con destino al Festival de Órgano Catedral de León, fue el mismo en el que la Junta decidió destinar más de 250.000 euros en subvenciones para festivales, conciertos y eventos culturales del más diverso tipo, alguno de ellos incluso basado en la música histórica y por tanto de corte similar a la veterana cita leonesa.

Entre los beneficiarios de esos apoyos se cuentan, por ejemplo, el Festival Internacional de Blues de Béjar (recibió 90.000 euros), el Festival de Teatro de Ciudad Rodrigo (contó con 111.250 euros), el Festival Abulensis, un certamen sobre sonidos históricos que celebra este año su tercera edición (15.000 euros) o el Festival Nacional de Cortometrajes Ciudad de Ávila (2.500 euros). Entre ellos está también el XI Congreso Nacional de Toros de Cuerda de Benavente, que recibió 30.000 euros a través de la Fundación Siglo de la Consejería de Cultura del gobierno autonómico, según informó a este periódico Alejandro Valderas, historiador y procurador de la Unión del Pueblo Leonés en las Cortes de Castilla y León.

Las cifras aumentan, lógicamente, si se amplía el lapso temporal contemplado. De esta manera, Valderas mostró que el número de convenios firmados por la Consejería de Cultura y Turismo entre los meses de enero y julio de este año ascendieron a 59: de ellos, tres son relativos a la Red de Teatros, seis giran en torno al patrimonio y dos se refieren a fundaciones.

Otros convencios

Una de las razones aducidas por la Junta para no colaborar en la edición número 31 del Festival de Órgano Catedral de León fue la negativa del Ayuntamiento de León a hacerlo, pero Alejandro Valderas hace ver que en ese tiempo «se firmaron seis convenios de festivales en los que no existe aportación económica de los ayuntamientos respectivos». Y es que en el caso del certamen leonés cada institución se ha guiado por el comportamiento de la inmediatamente inferior: «La Junta dijo que como el Ayuntamiento no aportaba nada, ellos no podían hacerlo; y el Ministerio de Cultura, que como no pagaba la Junta, pues que ellos tampoco», comentó el procurador bañezano.

En total, y aparte de los festivales arriba citados, las subvenciones de la Junta a festivales ascendieron a 283.759 euros. Entre ellos, siempre según los datos recabados por el archivero, investigador y político, están también el Festival de Teatro y Arte de Calle de Valladolid y la Semana del Cine de Medina del Campo. Y la cantidad conjunta aportada por la Junta para la Red de Teatros, que se financia con diversos ayuntamientos a través de convenios, asciende a 669.208 euros.

Valderas recordó que su partido ha protestado en varias ocasiones «por la opacidad de la Junta en cuanto a la información relativa a los convenios que firma. En realidad apenas sabemos más que los nombres de los que se firman; casi nada de su financiación y absolutamente nada de su articulado».

El procurador de la UPL en el parlamento autonómico resume así el hecho: «La Junta no ha colaborado en el Festival de Órgano de León porque no ha querido, ya que con una pequeña cantidad se habría logrado una segunda subvención del ministerio. Las cantidades dedicadas en este periodo a festivales y a la Red de Teatros son bajas, pero permitirían aportar algo al ciclo leonés». «Por otra parte, en estos listados no aparecen ni la costosísima programación del Centro Miguel Delibes ni el Festival de las Artes de Salamanca, que habitualmente se paga desde la Fundación Siglo. Tampoco apartecen las subvenciones destinadas a Las Edades del Hombre que suelen incluir fuera de programa, y otros eventos que se cubren con subvenciones directas de la Junta», prosiguió.

En dificultades

Este periódico informaba el pasado 19 de agosto de que prácticamente ninguna institución pública apoyaba el festival, y precisamente en la edición siguiente a la instalación del nuevo órgano catedralicio, considerado como uno de los mejores del mundo: un logro que constituía el gran objetivo del certamen y con él aspiraba a crecer en mucha mayor medida. Y así, en estos momentos, el festival otoñal cuenta con un único concierto propio —el del organista Giampaolo di Rosa, que prescinde voluntariamente de su caché— y seis que no pertenecen propiamente al evento, pues se enmarcan en la programación de Músicas Históricas que el Inaem ofrece anualmente.

El nuevo órgano costó 1,7 millones de euros, costeados por el Gobierno al 30%, la Junta y Caja España al 20% cada uno y Diputación, Ayuntamiento y Cabildo con el 30% restante. En los últimos años y en lo que respecta a los conciertos propiamente dichos, la Junta ayudaba al festival aportando la Orquesta Sinfónica de Castilla y León.