Los artistas reclaman en Gordoncillo más circuitos culturales rurales

Los artistas leoneses reclaman a las instituciones un mayor apoyo y el establecimiento circuitos culturales estables en los pueblos de la provincia. Gordoncillo acogió ayer un encuentro de los más de medio centenar de pintores, escultores y poetas que participan en la muestra Diálogo de intersecciones entre poesía y artes plásticas que puede visitarse hasta el 30 de noviembre en el Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), ubicado en la localidad.

«La cultura es la única variable que hoy puede salvar al mundo», afirmó el alcalde, Urbano Seco, en el inicio de la jornada.

Luis García, director de Arte y Exposiciones del Instituto Leonés de Cultura, quien lamentó que «esta provincia haya perdido treinta años» en materia cultural. Criticó que en la década de los ochenta, «en la que había dinero, no se supo aprovechar el momento». Aseguró que se construyeron casas de cultura «que no sirven. Auténticas atrocidades en las que lo único que preocupaba era que tuvieran bar».

De todos modos, García quiso dejar un halo de esperanza porque hay «importantísimas» manifestaciones culturales en la provincia «como el Festival de Teatro Amateur de Jiménez de Jamuz, el Museo Minero de Sabero... En este sentido hay que reconocer el trabajo que desde hace años se viene haciendo en Gordoncillo». Y Añadió que «si somos capaces de crear pequeños espacios culturales en muchos rincones de la provincia, todos seremos más ricos».

Otra de las problemáticas es la falta de financiación. A modo de ejemplo, el alcalde señaló que el Festival Internacional de Payasos que se celebra desde hace quince años en la localidad, en sus primeras ediciones tenía un presupuesto de unos 35.000 euros, «el 90% subvencionados». Este año fue de 12.000 con la única ayuda del Instituto Leonés de Cultura.

Otra de las deficiencias destacadas fue la mala publicitación de las actividades culturales que se desarrollan en la provincia, puesta de manifiesto por Eloísa Otero.

Una de las ideas finales aportadas es la necesidad de implicar a las gentes del medio rural en los proyectos culturales «porque sin ello no funcionan. Pero eso lleva un trabajo de base de mucho tiempo», dijo García.