Cien años de rebelión y modernismo
En 2015 se celebra el aniversario de Aída Lafuente, Monteserín, Gil y Carrasco, el palacio de Gaudí y Casa Benito .
Gaudí se juró a sí mismo no volver a poner los pies en Astorga. «Ni subido en globo volvería a cruzar esa ciudad», llegó a decir. En 2015 se cumplen cien años de la construcción del Palacio Episcopal que tanto sudor y quizá lágrimas le costó al arquitecto modernista, uno de los pocos edificios que erigió —junto a la Casa Botines— fuera de Cataluña. También en 1915 abría sus puertas en la capital leonesa Casa Benito, una taberna hoy legendaria, por la que han desfilado artistas e intelectuales, que ha sobrevivido a regímenes políticos y guerras y a sus propios fundadores.
2015 será un año mágico, en el que se cumplen dos siglos del nacimiento de uno de los escritores más insignes del Bierzo, Enrique Gil y Carrasco, autor de El Señor de Bembibre, considerada una obra maestra de la prosa romántica. Una plumilla, una violeta y la firma del escritor es el logotipo de la marca ‘Año Romántico’, creada por el Consejo del Bierzo y los municipios de Ponferrada, Bembibre y Villafranca para un ambicioso programa de actividades con las que conmemorar el bicentenario de Gil y Carrasco.
También han pasado cien años de la puesta en marcha del desaparecido Tren Burra (llamado así por su baja velocidad), que circuló entre 1915 y 1969. En 2015 se cumple el centenario de la muerte de Giner de los Ríos, creador de la Institución Libre de Enseñanza, con tanto arraigo en la provincia leonesa; o los 140 años del nacimiento de uno de los pintores más visionarios leoneses, Demetrio Monteserín, que pasó de retratar el espíritu leones a través de sus gentes y, sobre todo, de sus mujeres, a dibujar en las revistas de la época a la más elegante y refinada sociedad parisina.
Hay vidas dignas de ser recordadas, aunque sobre ellas pesen cien años de silencio. Como la apasionante y corta historia de Aída Lafuente, un auténtico símbolo de las libertades, venerada en Asturias y prácticamente desconocida en su León natal, pese a que el gran Rafael Alberti le dedicó su poema ‘Libertaria Lafuente’. Incluso su muerte es aún un misterio. No se sabe a ciencia cierta si murió combatiendo con una ametralladora en plena revolución del 34 o si fue fusilada. Forma parte de su leyenda.
La Capilla Clásica celebra sus primeros 50 años de historia y también en 2015 de cumple un siglo de la muerte de Francisco Fernández Blanco y Sierra Pambley, conocido como Don Paco, uno de los grandes filántropos leoneses.